La guerra que se vive en Sinaloa tuvo su origen porque Aureliano Guzmán Loera, El Guano, hermano de Joaquín El Chapo Guzmán, y los hijos de éste último, rompieron acuerdos, levantaron narcos y pretendieron tomar el control del cártel que encabeza Ismael El Mayo Zambada.
Autoridades federales que siguen de cerca el caso, aseguraron que no es creíble la versión de los hijos de El Chapo, quienes la semana pasada a través de una carta manifestaron que Dámaso López, El Licenciado, ex jefe de sicarios de El Chapo y quien ayudó a escapar al capo del penal de Puente Grande, en Jalisco, en 2001, haya pretendido atentar contra El Mayo.
El Licenciado, explicaron, es incondicional de El Mayo y solo actúa bajo sus órdenes; lo que sí ocurre, añadieron, es que El Licenciado y su hijo, El Mini Lic, están en una abierta disputa y buscan acabar con El Guano y los hijos de El Chapo, pleito en el que no ha intervenido Zambada.
Explicaron que Dámaso y su hijo del mismo nombre, se aliaron con César Carrillo, hijo del extinto líder del cártel de Juárez, Amado Carrillo, El Señor de los Cielos, familia, ésta última, a la que El Chapo comenzó a matar desde hace años por rencillas con Vicente Carrillo, El Viceroy.
La guerra contra El Guano y Los Chapitos se da en varios frentes; por un lado enfrentan al cártel de los Beltrán Leyva liderados por Fausto Isidro Meza, El Chapo Isidro, y por el otro a Los Dámasos que controlan varios grupos, entre ellos, Los Montana.
Mientras que Los Chapitos tienen sus células, como Los Chimalis, encabezados por Ivan Guzmán Salazar, El Chapito.
El Guano, explicaron, comenzó a cobrar el derecho de piso, no solo en diversas localidades de Sinaloa, sino también en la sierra, además de extorsionar, pretendiendo tomar el control del estado y otras zonas del país, lo que provocó el rompimiento.
El pasado sábado, el secretario de la Defensa, Salvador Cienfuegos, declaró que la violencia en Sinaloa se debe a la ausencia de El Chapo Guzmán, lo que desató pugnas internas por el control del cártel.
Días antes, en una carta dada a conocer por Azucena Uresti en MILENIO Televisión, los hijos de El Chapo acusaron que sufrieron, junto con El Mayo Zambada, un atentado planeado por Dámaso López.
Presencia de células
De acuerdo con un informe del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia de la PGR emitido en 2016, el cártel de Sinaloa tiene una mayor presencia en el norte del país.
El documento detallaba que la organización liderada por El Mayo Zambada tiene operando a los siguientes grupos: Gente Nueva (Chihuahua y Sinaloa), Los Cabrera (Durango y Chihuahua), cártel del Poniente o de La Laguna o Los Bardales (Durango y Coahuila), El Aquiles y El Tigre (Baja California), Del 28 (Baja California Sur), Los Artistas Asesinos y Los Mexicles (pandillas, ambas en Chihuahua), y Los Salazar y Los Memos, en Sonora.
Por su parte, el cártel de los Beltrán Leyva, ahora dirigido por El Chapo Isidro, tras la captura de Héctor Beltrán, El H, y su esposa Clara Elena Laborín, La Señora, opera con las siguientes células:
Los Mazatlecos (Sinaloa y BCS), El 2 Mil (Sonora), Los Granados (Guerrero, región de Tierra Caliente), Los Rojos (Guerrero, norte y centro, y en Morelos), La Oficina (Aguascalientes y BCS), Los Ardillos (Guerrero, región montaña y centro) y el cártel Independiente de Acapulco, en Guerrero).