Durante la tarde del jueves 25 de abril, fueron retirados los mosaicos que desde 2020 madres buscadoras colocaron frente al edificio de la Fiscalía General de la República (FGR) a modo de memorial para recordar a sus desaparecidos y exigir su búsqueda.
Esto, a casi dos meses de que la FGR dejó totalmente el edificio que ocupaba en la Glorieta de Insurgentes.
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En febrero de 2020, el colectivo Huellas de la Memoria colocó el primer mosaico con los nombres y los rostros de personas desaparecidas, así como la huella de los zapatos que sus familias usan durante sus búsquedas.
Desde entonces, el memorial fue creciendo. En cada oportunidad, los colectivos acudían a la glorieta, frente al número 20 de la avenida Insurgentes, y agregaban más mosaicos.
Este miércoles, los familiares se enteraron de que el memorial ya fue desmontado. MILENIO consultó con las autoridades si habían retirado los mosaicos. La Fiscalía General de la República (FGR) refirió que desde el 29 de febrero ya no tienen personal en ese inmueble que rentaba, pues ya está habilitado su edificio en Santa Fe.
Del mismo modo, el gobierno capitalino negó haber retirado los mosaicos.
¿Qué dicen las madres buscadoras?
Ante esta situación, madres buscadoras exigen que las autoridades capitalinas y federales investiguen quién retiró su memorial y que sea restituido.
“Sabemos que no les importamos, y si ponemos un memorial aquí o allá nos los van a seguir tirando, pero esto es algo representativo para recordarles que es su obligación como Estado, como gobierno mexicano, y para que la gente y la sociedad vea y no se les olvide que son miles de personas desaparecidas, y que necesitan ser localizadas y regresadas a sus familias”, reprochó María Navarro, integrante del colectivo Huellas de la Memoria.
Ella busca a su esposo Mauricio Aguilar Leros, quien desapareció el 27 de mayo del 2011 en Córdoba, Veracruz. El retrato de Mauricio, así como la huella de los zapatos con los que María ha recorrido kilómetros en su búsqueda, estaban pegados frente a la barda de la antigua sede de la FGR.
“Queremos que nos entreguen y nos regresen las placas porque ellos se echan la bolita y el gobierno dice que ellos no fueron. Hay cámaras y tenemos que ver las grabaciones para que nos den información. No puede llegar un agente civil común y corriente para quitarlas, mandaron a alguien a quitarlas”, aseguró María Navarro.
De acuerdo con otros integrantes del colectivo Huellas de la Memoria, trabajadores de la zona les dijeron que las personas que retiraron los mosaicos entraban y salían del edificio que actualmente está desocupado.
Esta no es la primera vez que ocurre algo similar. En Jalisco, el colectivo Por Amor a Ellxs, también colocó mosaicos en la Glorieta de las y los Desaparecidos, y las autoridades mandaron retirarlas, aunque después fueron colocados ante la presión de los familiares de los desaparecidos.
RM