Una veladora, un plato de sopa, un plátano y un vaso con agua acompañan la fotografía de Rafael Flores Sánchez, sus familiares permanecen preocupados pidiéndole a Dios que regrese sano y salvo a su casa, en Metepec, donde fue visto por última vez el pasado 10 de septiembre cruzando la puerta y subiendo a su vehículo. Debido a la violencia que azota en el Valle de Toluca, la familia pasa cada minuto con miedo, dolor y frustración al no saber nada de él.
De acuerdo con los familiares, ese día Rafael salió de casa poco después de las 19:00 horas, subió a su vehículo, sin decir a donde iba y no regresó a casa, después de las 23:00 horas trataron de comunicarse con él, pero fue imposible contactarlo. “Me intenté comunicar con él y no me contestó. Es lo que estamos viendo con la fiscalía para localizarlo, porque nos interesa la vida de mi hijo”, señaló la madre.
Al no tener respuesta de Rafael, familiares y amigos comenzaron a buscarlo en la zona, pero no tuvieron resultados; por lo que al día siguiente acudieron a denunciar la desaparición en la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), donde emitieron la ficha de búsqueda.
La alerta Odisea fue publicada en redes sociales, en postes de la vía pública e incluso en puentes peatonales en diferentes puntos, pero hasta el momento no ha sido localizado, aunque su vehículo fue hallado recientemente en San Juan Tilapa, en el municipio de Toluca.
Rafael estudiaba derecho en una escuela particular cerca del zoológico de Zacango y afirman que siempre llegaba a casa. Debido a la violencia que impera en el Valle de Toluca y diversos casos de desaparición con desenlaces fatales, la madre pide ayuda a las autoridades para que su hijo regrese sano y salvo.
“Está en juego la vida de mi hijo y no sabemos qué clase de gente lo tenga. Nos preocupa mucho y nos urge encontrarlo, porque él era un niño bueno”, afirmó.
MMCF