Efectivos del Ejército reconocieron que en el operativo para aprehender a Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, fueron superados en número por los criminales: mientras las autoridades desplegaron 350 soldados, los narcos eran “700 u 800”.
En un video que circuló entre la tropa que participó en el operativo en Sinaloa, y más tarde difundido en redes sociales de algunos soldados, se escucha que aun así les hicieron frente, causándoles cinco bajas, aunque creen que fueron más.
“En Culiacán cumplimos con la misión. A pesar de que se estiman que eran entre 700, 800 delincuentes. Solo 350 de nosotros les hicimos frente. Les causamos más de cinco bajas… pero estamos seguros de que fueron más los delincuentes muertos”, relataron.
También aseguraron que se cumplió el objetivo: detener a un delincuente, “pero cobardemente amenazaron con atacar a inocentes, mujeres, niños, estudiantes y familias de militares”. Por ello cesaron las operaciones.
“Esto demuestra que son cobardes, porque en el enfrentamiento directo nos dieron con todo, usando su máximo poder de fuego, y no pudieron con nosotros… solo usamos lo necesario para defendernos y no causar daño a gente inocente, no obstante de que tenemos más potencia de fuego.
“Nosotros protegimos a las familias sinaloenses, porque nosotros sí tenemos valores, porque nosotros sí tenemos principios, porque nosotros sí amamos a México”, afirmaron en el video difundido.
El viernes, la Secretaría de la Defensa Nacional informó que se registraron 14 agresiones con armas de fuego a personal del Ejército y la Guardia Nacional. Tras los enfrentamientos, un oficial y siete elementos de tropa resultaron heridos por arma de fuego, y ocho de tropa retenidos y liberados sin lesiones.
También circuló un video de un minuto con 26 segundos con la versión de la Guardia Nacional, en el que se afirma que se “cumplió con la misión, a pesar del gran número de agresores y la minoría que representaban los 40 elementos” que integraron el operativo.
En esta pieza que se difundió en redes de la tropa dijeron tener certeza de que fallecieron más de cinco delincuentes. “La Guardia tiene claro que el objetivo es combatir a la delincuencia, pero también que es primordial cuidar del bienestar de la sociedad. La delincuencia lo sabe y por eso amenazaron con atacar a inocentes”.
LLEGAN MÁS REFUERZOS
Un convoy de 197 militares del Cuerpo Especial de Fusileros Paracaidistas del Ejército se trasladó vía terrestre a Culiacán, Sinaloa, para reforzar los operativos de seguridad.
La Sedena informó que su equipamiento está compuesto por armas largas y cortas, ametralladoras, lanzagranadas, lanzacohetes y granadas de mano. También equipo de intervención, táctico de radiocomunicación, médico de urgencia y especializado para detención de vehículos.
“Los refuerzos están altamente capacitados y adiestrados para realizar operaciones de alto impacto en áreas urbanas y rurales con gran flexibilidad y rapidez para cumplir cualquier tipo de misión”, indicó.
REGRESO A LA NORMALIDAD
Con el partido de Los Tomateros contra Los Sultanes de la Liga Mexicana del Pacífico volvió parte de la normalidad a la capital de Sinaloa. El encuentro fue pospuesto para este sábado luego de las balaceras.
En estaciones de radio y programas de televisión promueven retomar la vida cotidiana lo antes posible con el lema “Somos más que la violencia y el narcotráfico”.
En las calles se percibe mayor afluencia vehicular, aunque en los centros comerciales aún hay pocas personas. “La gente opina sin saber lo que vivimos aquí, lo del jueves fue una guerra. Estaríamos peor sí la decisión hubiera sido otra”, comentó Mario González, responsable de la capilla en honor a Jesús Malverde, el patrono de los narcotraficantes.
En tanto, 24 personas, entre civiles, soldados y policías, que resultaron heridas durante los enfrentamientos se encuentran fuera peligro en diversos hospitales. El secretario de Salud estatal, Efrén Encinas, precisó que ningún presunto delincuente llegó a los nosocomios de la ciudad.