Luego del masivo operativo denominado Operación Atarraya, con el cual aseguraron 175 centros cheleros, bares y antros, fuentes al interior de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informaron que dicha movilización surgió desde la masacre ocurrida en el bar Bling Bling, en Cuautitlán Izcalli.
Además, revelaron que en el reciente operativo hallaron indicios que vinculan al crimen organizado con algunos establecimientos, en los cuales se habrían relacionado con los propios empleados para vender drogas y alcohol robado.
La noche del viernes 13 de diciembre, la Fiscalía mexiquense en coordinación con autoridades federales y estatales iniciaron la Operación Atarraya en 175 establecimientos ubicados en 27 municipios, en el cual aseguraron 175 espacios objetivos y detuvieron a 26 probables delincuentes.
Sin embargo, las fuentes consultadas por MILENIO Estado de México indicaron que este mega operativo surgió tras el ataque armado en el bar Bling Bling de Cuautitlán Izcalli, en donde murieron seis personas, versión que coincide con lo dicho por el secretario de Seguridad del Estado de México, Cristóbal Castañeda Camarillo quien, días antes, anunció que pondrían especial atención en este tipo de establecimientos.
"Estamos invitando a los presidentes municipales a tener atención en los bares y cantinas, tenemos lamentables casos como el de Querétaro, como el de Tabasco, aquí en Cuautitlán Izcalli que tuvimos un ataque a un bar; necesitan reforzar las medidas de control en los bares y cantinas porque sabemos que en algunos entran menores de edad, en algunos se consumen drogas", dijo el secretario el pasado 3 de diciembre.
Aseguraron 175 establecimientos
Con elementos e indicio recabados previamente, las autoridades llevaron a cabo la Operación Atarraya la noche del viernes 13 y sábado 14 de diciembre en establecimientos de 27 municipios, la mayoría en Naucalpan, Nezahualcóyotl y Toluca.
Al concluir las diligencias, fueron asegurados los 175 inmuebles, en donde aseguraron narcóticos similares a la marihuana, cocaína y cristal, así como armas de fuego.
También confirmaron que, en algunos de los bares y centros cheleros había menores de edad a quienes les vendían alcohol, drogas e incluso eran sujetos a extorsiones para obligarlos a consumir. "De igual forma se logró salvaguardar a personas presuntamente víctimas de trata", informó la FGJEM.
Participación del crimen organizado
En estas acciones fueron detenidas 26 personas como probables responsables, sin embargo, las autoridades se limitaron a detallar cuales fueron los delitos por los que fueron detenidos.
No obstante, las fuentes consultadas revelaron que, en algunos de los establecimientos estaban involucradas células de la Familia Michoacana y de otros grupos delictivos, no precisamente "grandes grupos".
Los indicios con los que cuenta la Fiscalía mexiquense en los bares, centros cheleros o antros donde operan estas agrupaciones delictivas, refieren que la forma de operar es que usaban esos espacios como centro de venta de drogas, incluso de alcohol robado a transporte de carga.
Empleados involucrados
La Fiscalía pudo establecer que hubo casos en los cuales, los dueños de los establecimientos no estaban enterados de las operaciones de grupos criminales, ya que había una relación de los mismos empleados con los delincuentes, o "simplemente" los integrantes de las células se reunían en estos establecimientos para planear sus delitos, es decir, los usaban como base.
La información que pudo obtener MILENIO Estado de México, a través de las fuentes consultadas, es que hubo casos en los que los criminales ingresaban armados a los bares o antros y amenazaban a los empleados para atenderlos.
Incluso, los miembros del crimen organizado les prometían protección y sus visitas contantes generaron una relación de confianza entre ambas partes para finalmente poder operar con la venta de drogas y alcohol robado.
Ayuntamientos serán investigados
La Fiscalía General de Justicia mexiquense también informó que habrá investigaciones con las prioridad autoridades, principalmente municipales, ya que podrían haber permitido estas actividades ilícitas.
PNMO