Tras una semana del accidente que se registró en la carretera Toluca-Zitácuaro a la altura del municipio de Almoloya de Juárez, donde cuatro personas, entre ellos una niña de tres años murieron, familiares de las víctimas exigieron justicia, pues hasta el momento no hay personas detenidas a pesar de que el responsable presuntamente iba en estado de ebriedad.
El percance ocurrió el 1 de abril antes de las 16:00 horas a pocos kilómetros de la caseta de “La Hortaliza”, donde dos autos chocaron de frente dejando saldo de cuatro personas sin vida: Amber Ximena Martínez Monreal de 3 años; Paola Monreal Castelán de 25 años; Amparo Guzmán Mendoza y Maximiliano Martínez González, de 83 y 80 años, quienes eran bisabuelos de la pequeña.
En ese auto también viajaban Bryan Martínez, papá de Amber, y el padre de Bryan, quienes resultaron gravemente lesionados y fueron trasladados a un hospital en Toluca. "Íbamos seis: mi papá, mi abuelo, mi abuela, mi esposa, mi niña y yo. Mi papá está muy grave todavía en el hospital, fuimos a los que nos llevaron al hospital. Todos los gastos han corrido por nuestra cuenta", comentó Bryan, quien ya se recupera en casa.
Recuerda que ese día habían salido de su casa, en el municipio de Tlalnepantla, y se dirigieron a Michoacán para ver a unos familiares; sin embargo, el conductor del otro vehículo perdió el control y chocó con ellos.
"Alcance a ver que el auto se salió del carril y nos impactó. Ya de ahí no supe nada hasta que desperté y vi que todos estaban dentro del carro y solo recuerdo que tenía a mi niña en mi cuerpo", recordó.
Herido y en estado de shock, clamaba que atendieran a su pequeña, pero ya era muy tarde, Amber había fallecido. "Yo quería que atendieran primero a mi niña y me dijeron que ya no se podía hacer nada, me llevaron en ambulancia y ya no supe nada".
Rebeca Ramírez Galindo, testigo del accidente, señaló que en el otro vehículo iban tres adultos y una bebé de un año y seis meses; sin embargo, tanto el padre la madre de la menor estaban alcoholizados.
"Todos venían ebrios, había muchos envases de cerveza en el vehículo; la muchacha nos dijo que venían de Valle de Bravo". Agregó después del accidente las personas no fueron trasladadas a un hospital y tampoco se percataron si fueron detenidos.
Por su parte, el padre de Paola y abuelo de Amber exigió a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) que este caso no quede impune, pues asegura que hay pruebas que indican que el responsable iba en estado de ebriedad y su imprudencia causó la muerte de sus seres queridos.
"Exijo justicia por mi única hija y mi única nieta., ahorita sentimos indignación porque no hay personas detenidas".
MMCF