Pistoleros bloquean retorno de desplazados

Civiles armados que permanecen desde hace una semana en la comunidad de Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo, impidieron que mil 680 desplazados regresaran a sus casas, pese a que los resguardaba personal del Ejército y la policía estatal.

Desde la jornada del viernes 16 de noviembre, los desplazados habían dado a conocer su determinación de regresar hacia comunidades como Filo de Caballos, Campo de Aviación, Los Morros, Corralitos, Puentecillas y Carrizal.

El subsecretario para Asuntos Políticos de la Secretaría General de Gobierno, Martín Maldonado, intervino para convencer a los comisarios y representantes de que aplazaran la salida hasta la mañana del sábado 17, a fin de buscar un acuerdo con los coordinadores de Tlacotepec, quienes permanecen pertrechados en sus pueblos.

Para las 10 horas, los desplazados comenzaron a preparar la salida por la carretera de terracería que primero lleva hacia El Naranjo y después hacia Los Morros, en lo que se conoce como El corredor de la muerte.

Para resguardar la caravana, la Secretaría de Seguridad Pública puso a disposición a personal de la Unidad de Fuerzas Especiales y del recién creado Grupo Jaguar, además, al frente se colocaron unidades artilladas de la Secretaría de la Defensa Nacional. En total era un contingente de seguridad de unos 150 elementos.

La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG) reportó que regresaban a sus hogares mil 680 desplazados, aunque el vocero oficial del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, indicó que eran 270.

La caravana tomó la ruta de terracería; en El Naranjo se sumó un contingente importante de varones (la mayoría con aspecto de campesinos), quienes esperaban las condiciones para regresar.

Los desplazados vigilados circularon entre cerros y barrancas por tres horas, siempre en ascenso hacia la parte alta del municipio de Leonardo Bravo; poco atrás de la avanzada se observó al alcalde Ismael Cástulo Guzmán y la delegada de Gobierno en la región Centro, Norma Yolanda Armenta.

En el recorrido estuvo Hipólito Lugo Cortés, visitador general de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y Adelaido Memije por parte de la CDHEG.

Se hizo una escala en Los Morros, después de pasar Tres Cruces, la última comunidad del municipio de Eduardo Neri.

LA AGRESIÓN

En Los Morros se observó una barricada armada por integrantes de la Policía Ciudadana de Leonardo Bravo, quienes se encontraban apostados en los cerros, con el argumento de evitar que los integrantes de la Policía Comunitaria de Tlacotepec (PCT) ganaran terreno.

Se informó que las autodefensas de Tlacotepec ampliaron su zona de control de Filo de Caballos hacia Campo de Aviación, por lo que antes de que el grueso de la caravana avanzara se optó por mandar una avanzada con unidades del Ejército, la Policía del estado y los enviados del gobierno para dialogar con los civiles armados y facilitar el retorno de los desplazados.

Al frente iban dos vehículos de reporteros, juntó con una hummer de la Sedena. A menos de un kilómetro de abandonar Los Morros, en una zona de curvas, se escuchó el primer un disparo, después una ráfaga y todas las unidades se replegaron hacia los cerros para resguardarse.

El grupo de reporteros quedó hasta el frente; atrás, un pequeño contingente de militares se parapetó para tratar de ubicar el punto desde el que se produjeron los disparos. Tras varios minutos de búsqueda, establecieron que el ataque se produjo en la parte baja de los cerros.

La unidad en que se trasladaba el operador del gobierno estatal, Martín Maldonado, regresó a Los Morros, donde se estableció una base a fin de que los desplazados pasen ahí la noche.

Mientras el personal militar y policiaco avanzó un par de kilómetros más a pie, en busca de posibles agresores entre los cerros.

Las autoridades informaron que no hubo heridos ni tampoco atacantes detenidos. Sin embargo, no precisaron de qué grupo armado provino el ataque.

CLAVES

LA IRRUPCIÓN
El 12 de noviembre, civiles armados de Tlacotepec, con apoyo de pistoleros de cuatro municipios, irrumpieron en Filo de Caballos.

EL OBJETIVO
Las llamadas guardias comunitarias argumentaron que su intención era enfrentar a criminales para pacificar la zona.

CONFLICTO
Autoridades señalaron que la verdadera razón es la disputa por el control de la siembra de amapola.

EN CIFRAS
2, el número de muertos que las autoridades confirman, aunque las autodefensas aseguran que hubo 7 y una cifra indeterminada de heridos.

1,600 desplazados de esta zona en Leonardo Bravo, tras la irrupción de civiles armados; hubo personas de otras alcaldías que también se fueron.

150, la cifra de personas militar y policía estatal que fueron destinados a resguardar el regreso de los desplazados la mañana de este sábado.