Integrantes de colectivos de búsqueda de personas desaparecidas en Guanajuato, están preocupados por los múltiples asesinatos que se han registrado en contra de sus compañeras y compañeros mientras realizan la labor de encontrar pistas sobre el paradero de sus familiares.
Y es que al menos de manera pública se conocen tres casos como el asesinato de Javier Barajas, quien fue asesinado en Salvatierra cuando era integrante de la Comisión Estatal de Búsqueda luego de varios meses de buscar a su hermana la maestra Lupita y una señora de León, a quien también mataron mientras buscaba a su hijo de 16 años.
Bibiana Mendoza, integrante del colectivo Hasta Encontrarte, comentó que tienen conocimiento de otro joven de Pénjamo que buscaba a su hermana y también lo mataron, así como de otros casos que no se han dado a conocer por temor de los familiares.
“Yo creo con preocupación el tema de los asesinatos a madres buscadoras o a hijas buscadoras, yo creo que las autoridades deben de asegurar por sobre todas las cosas la integridad física, moral y psicológica de las madres buscadoras, creo que deben de prever este tema de seguridad de cómo va a asegurarse una madre buscadora en el estado de Guanajuato que no sea víctima de homicidio o víctima de desaparición por tener a un familiar desaparecido”, comentó.
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Dijo que los familiares de las víctimas no pidieron estar en ese lugar y son las que mayores consecuencias viven, pues en ocasiones, como ha ocurrido en Guanajuato, hasta terminan con sus vidas.
Enfatizó que en sus mensajes siempre dicen que no buscan culpables, sino a sus familiares, pero que también las autoridades deben hacer un trabajo estratégico para proteger a las mamás buscadoras y se aseguren que regresen con bien a casa, pues tienen una deuda con la ciudadanía ya que la Fiscalía les debe a sus familiares y en ocasiones las revictimizan llamándolas revoltosas por conocer sus derechos y no ven que sólo hacen el trabajo de activistas.
“En uno de esos casos no llegó un hermano que andaba en búsqueda de su hermana en Pénjamo y la encontró en una fosa ahí mismo en Pénjamo, días después lo asesinan, entonces, se supo, pero no hay como un dato real”, platicó.
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Comentó que las autoridades les fallaron la primera vez cuando le desaparecieron a sus familiares y dejaron crecer la violencia en el estado que está insostenible y les volvieron a fallar cuando absolutamente nadie salió a buscarlo a las calles.
Aseguró que posteriormente fallaron al negar la violencia y las fosas clandestinas y ahora les vuelven a fallar cuando las revictimizan por hacer el trabajo que ellos han dejado de hacer, además de que no les brindan la información de las fosas clandestinas que han encontrado desde el año 2009 pese a que ya lo solicitaron y tiene el derecho de ser parte de los procesos de búsqueda de sus familiares. .
Dijo que muchas personas se acercan a los colectivos, pero no quieren formar parte de ellos ni que las fotos de sus familiares desaparecidos se publiquen porque temen por sus vidas, sólo quieren información de los SEMEFOS y de las fosas clandestinas para ver si dar con el paradero de sus seres queridos.