La Suprema Corte de Justicia de la Nación fue blanco de ataque por parte de un grupo de estudiantes encapuchados que acompañaban a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa que realizaban una protesta en la escalinata principal del Alto Tribunal.
El incidente provocó que la Corte cerrara todos sus accesos, mientras que elementos del Cuerpo de Granaderos trataban de contener al reducido grupo de estudiantes encapuchados que se caracterizaban por estar rapados; los agresores lanzaron ladrillos contra la puerta principal de bronce que se localiza en la calle de Pino Suárez número 2, a un costado del Zócalo capitalino.
En todo momento, los padres de los normalistas desaparecidos se manifestaron de forma pacífica y solo exigieron ser atendidos por el ministro presidente de la SCJN, Luis María Aguilar Morelos, quien en esos momentos presidía la sesión del Pleno donde se discutía el tema de la Constitución de la Ciudad de México.
Durante una hora y media la Corte mantuvo cerrado el acceso al público, debido a la agresión de los estudiantes; el personal que ahí labora tampoco podía salir.
Alrededor de las cuatro y media de la tarde, el ministro Aguilar Morales supervisó, acompañado de personal de seguridad, los daños a la puerta principal del máximo tribunal de justicia del país, los cuales fueron mínimos y que ordenó reparar; los relieves del portón no resultaron afectados.