La PGR apeló la liberación de los cuatro principales implicados en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, que de acuerdo con las pesquisas son los presuntos responsables del levantamiento, secuestro y calcinamiento de los jóvenes.
Funcionarios federales revelaron a MILENIO que la PGR cuenta con elementos para volver a detener a Agustín García, El Chereje; a Jonathan Osorio, El Jona; a Patricio Reyes, El Pato, y a Salvador Reza, El Wereke.
Dichas personas quedaron en libertad "bajo las reservas de ley", lo que no implica que están absueltos del secuestro de los estudiantes, sino que obliga a la PGR aportar nuevos elementos para demostrar su participación.
Los funcionarios mencionaron que la juez no tomó en cuenta que la oficina del caso Iguala documentó que el 26 y 27 de septiembre de 2014, El Jona se comunicó con César Nava, entonces subdirector de la Policía de Cocula, y quien recibió órdenes de Francisco Salgado, quien fungía como director municipal de Iguala, para coordinar el traslado de 13 estudiantes a la Loma del Coyote para ser entregados a Guerreros Unidos.
De igual manera, se cuenta con el registro de las llamadas realizadas por Salvador Reza y Miguel Miranda, El Pajarraco.
Asimismo, hay declaraciones de trabajadores de limpia del basurero municipal de Cocula que afirman que cuatro sujetos armados no los dejaron ingresar al tiradero; a través de la cámara de Gesell, los empleados reconocieron a El Jona y a El Pato.
Puntualizaron que la indagatoria "no es un tema de declaraciones, sino es una investigación técnica", por lo que un tribunal unitario deberá determinar la validez de las pruebas presentadas por la PGR sobre el análisis telefónico, el cruce de llamadas que tuvieron en fechas posteriores el suegro de Erick Uriel, La Rana, libre por violaciones al debido proceso.
Detallaron que se cuenta con el registro telefónico de Salvador Reza, quien a las 9 de la noche del 26 de septiembre realizó varias llamadas a integrantes de Guerreros Unidos; lo anterior se desprende del registro de telefonía celular que lo ubican en Loma del Coyote, "muy cerca de la casa" de Gildardo López, El Gil, quien ordenó el levantamiento, secuestro y muerte de los 43.
Comentaron que están extrañados por la decisión de la juez y subrayaron que también son clave las declaraciones de Salgado Valladares, quien refirió que el día del ataque él no hizo nada y que César Nava fue quien sacó a los estudiantes del Palacio de Justicia de Iguala.
La juez, dijeron, no tomó en cuenta que en el expediente está la declaración del hermano y mamá del Pato, quienes aseguraron que andaba en malos pasos.
jbh