Saskia Niño de Rivera, co-fundadora y vocera de Reinserta, remarcó la necesidad de políticas públicas y protocolos dentro de las cárceles en materia de salud y de creación de espacios lúdicos para la protección de la maternidad y el desarrollo infantil pleno, teniendo como primer paso la modificación a la Ley de Ejecución Penal.
En el “Encuentro por las Niñas, Niños y Adolescentes expuestos a la violencia en México”, destacó el cambio en la Ley de Maternidad, donde se especifica que el menor de edad tiene que nacer en prisión para poderse quedar con su mamá.
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“¿Qué pasa con esa mamá que es privada de su libertad a los 15 días de dar a luz?, ya no puede ingresar a su hijo al reclusorio porque la ley se modificó […]. Si el niño está en el rango de los 0 a los 3 años, tiene el derecho de poder estar cerca de su mamá”, alegó.
También mencionó el presupuesto para el 2024, siendo “el más bajo de la historia” en materia de salvaguardar la integridad de las niñas, niños y adolescentes, “uno de los grandes problemas que tiene el país” debido a la normalización de la violencia y su uso en la niñez.
Obstáculos para mamás e hijos dentro de prisión
Durante la conferencia, Niño de Rivera indicó que el primer obstáculo es la falta de segregación, puesto que el seis por ciento de la población penitenciaria total son mujeres. Sin embargo, las 200 infancias existentes sólo disponen de 18 centros exclusivos de las 350 cárceles a nivel nacional, por lo que deben compartir espacio con la población varonil.
“Teniendo a los agresores sexuales dentro de los reclusorios […] muchos niños han sido agredidos sexualmente dentro de los penales o que sus papás viven en los penales y van a visitar a sus papás adentro de prisión”, alertó.
Señaló el problema de hacinamiento al recordar el caso de los “niños quemados de Santa Marta”, donde siete mamás y siete niños compartían celda y eran encerrados con candado por doce horas.
“Hemos tenido casos en donde la mamá se cuelga y no sacan el cuerpo hasta el siguiente día que abren la celda y están los niños adentro […] No es un tema de castigo o de venganza, es una cuestión de humanidad, que tengan los mismos (derechos) que los niños que están afuera”, subrayó.
En cuanto a la salud, Niño de Rivera denunció que hay guardias que insisten en entrar al quirófano y esposar a la interna cuando está en labor de parto, además de llevarse a los recién nacidos “porque disminuye el riesgo de que se vayan a fugar”.
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Avances penitenciarios en materia de maternidad e infancias
Expresó con orgullo la labor de Reinserta en el sexenio pasado al implementar espacios lúdicos para niñas y niños en cárceles del Estado de México, junto con el reconocimiento que han otorgado los jueces penales a los talleres de maternidad como parte de actividades que fomentan la reinserción social de la interna.
Reconoció a las madres privadas de la libertad por intentar modificar sus conductas en materia de crianza debido a la normalización de la violencia en esta población debido a sus historias de vida en el núcleo familiar o en las calles.
“Yo no quiero replicar lo que mi mamá me hizo, porque yo sé el dolor que implicó, yo soy la consecuencia viviente […], pero cuando se está comportando pésimo, empieza a llorar y no se controla, no sé qué hacer más que soltarle un golpe”, dijo.
Finalmente, reiteró la importancia de romper círculos de violencia en las familias que viven en prisión a través de información y herramientas, así como otorgar espacios funcionales a las infancias, pues “pueden ser libres dentro de la cárcel”.
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