Policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) fueron testigos de la agresividad del futbolista del Club América, Renato Ibarra, contra su esposa y su cuñada. El ecuatoriano continuó con su actitud violenta, pese a la presencia de los uniformados, que llegaron al domicilio tras una llamada de auxilio.
“¡Ya escucharon, pendejas, sáquense a la verga, aunque estén los policías les vamos a partir la madre!”, gritó el jugador a Lucely Estefania y Ana Karen.
Los oficiales tuvieron que intervenir para que cesara las amenazas contra ambas mujeres, que ya habían sido golpeadas.
El testimonio de los policías forma parte de la carpeta de investigación CI-FTL/TLP-4/UI-1 C/D/00586/03-2020 contra Ibarra, quien está en el Reclusorio Oriente, como probable responsable de los delitos de tentativa de feminicidio, tentativa de aborto y violencia familiar.
Según las declaraciones de los oficiales Guadalupe Rincón Peña y Raúl Joivanni Estrada, de la patrulla MX-081-B5 y de la moto patrulla MXCB32, respectivamente, el futbolista y cuatro personas más estaban muy alterados.
Alexandra Marisol 'I' y Tania Elizabeth 'A', también detenidas, gritaron a las víctimas: “¡Váyanse de aquí, putas, no las queremos en casa!".
Ambos agentes evitaron que continuaran los ataques, por lo que apegados al protocolo y arrestaron a Renato, sus hermanos Alexandra Marisol y Bayron Fernando, así como sus acompañantes Robinson Marlon 'A' y Tania Elizabeth 'A' en el domicilio del jugador, ubicado en la alcaldía Tlalpan.
En la indagatoria quedó asentado que a las 19:50 horas del 6 de marzo el tripulante de la motopatrulla MXCB 32 recibió un llamado de auxilio para trasladarse a la casa donde ocurrió la agresión.
Lucely Estefania y Ana Karen dijeron a la oficial Guadalupe Rincón que habían sido golpeadas por las cinco personas que posteriormente fueron detenidas y trasladadas ante el Ministerio Público.
Al llegar a la Fiscalía de Tlalpan, la esposa embarazada de Renato dijo que tenía dolor en el vientre, por lo que llegó la ambulancia MX -850F1.
La mujer con 10 semanas de gestación fue llevada al hospital Ángeles del Pedregal con diagnóstico de posible amenaza de aborto.
Las declaraciones de los oficiales de la SSC se integraron a la carpeta de investigación contra el futbolista y sus acompañantes.
Los cinco detenidos enfrentan acusaciones por tentativa de feminicidio y tentativa de aborto, mientras que a Ibarra se le imputó también violencia familiar.
Este jueves se llevará a cabo la audiencia en la que una juez determinará si los vincula a proceso.
EB