A poco más de una semana de la masacre del bar “Bling-Bling”, ocurrida en el municipio de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, las autoridades han presumido una serie de detenciones y procesos judiciales iniciados, sin embargo, algunos de los detenidos fueron inocentes, otros estarían relacionados con células de narcomenudistas y si bien fue capturado el posible autor intelectual, lo cierto es que no hay información sobre el estatus actual de los pistoleros por el ataque registrado.
En principio, la noche del domingo 10 de octubre, fue desarrollada una balacera en la comunidad de San Francisco Tepojaco, en un centro nocturno.
De acuerdo con un reporte de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) ese día murieron en el sitio Juan “N”, alias Oso, Gory, La Güera, Chivo, Gemelo y un adolescente de 15 años de edad; mientras que otro joven apodado Patitas murió en el hospital.
Luego, otras seis personas resultaron heridas y fueron trasladadas a diversos hospitales a consecuencia de las heridas.
La relatoría de la autoridad señala que el lunes 11 de octubre fue desplegado un operativo en las inmediaciones de Cuautitlán Izcalli para poder dar captura a los responsables del multihomicidio, sin embargo, las condiciones de seguridad no fueron las óptimas para los agentes y tuvieron que reanudar las actividades hasta el martes 12.
Ese día, fueron presentadas ante la Fiscalía de Asuntos Especiales (FAE) 11 personas que fueron identificadas como objetivos que podrían estar relacionados con la masacre. La mayoría de ellos fueron detenidos en el funeral de una de las víctimas, quien habría muerto en la balacera.
A la mañana siguiente, el miércoles 13, dos personas más fueron enviadas a la misma Fiscalía por su presunta relación con el grupo, sin embargo, la tarde de ese mismo día siete personas fueron puestas en libertad porqué prácticamente no tenían relación con el crimen.
Una fuente consultada refirió que, si bien podían detenerlos por su presunta participación en faltas como resistencia, lo cierto es que al no tener los elementos de la investigación central, fueron puestos en libertad, sin embargo, no todo fue como lo planearon las familias, ya que algunos de ellos manifestaron a haber sido víctimas de supuesta tortura por la Fiscalía estatal e incluso dieron cuenta a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), la cual ordenó medidas cautelares para estas víctimas.
En un comunicado de prensa, la Fiscalía explicó que las lesiones que tenían algunos de los detenidos estarían relacionadas con la detención y que “a efecto de deslindar responsabilidad de los servidores públicos que pudieran estar involucrados, esta Fiscalía inició investigación en relación con estos hechos”.
Respecto a las detenciones y principales sospechosos, no fue hasta la noche del jueves 14 de noviembre, que un convoy integrado por elementos de los tres órdenes de gobierno trasladó a la Fiscalía de Combate al Secuestro a los sospechosos, en espera de obtener una orden de aprehensión, la cual fue dada hasta la noche del viernes 15 de noviembre y en consecuencia fueron enviados al penal de Cuautitlán Izcalli.
¿Cuál fue el origen del conflicto?
En un comunicado, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México dejó ver que la masacre del “Bling-Bling” aparentemente estaría relacionada con dos células criminales dedicadas al narcomenudeo en la zona oriente del Estado de México y que incluso podrían estar vinculadas con la desaparición y homicidio de otras personas en el municipio de Jilotepec, documentado en octubre pasado.
La narrativa de la autoridad reveló que el 8 de octubre fue localizado en el municipio de Jilotepec, Estado de México, un automóvil calcinado con los restos de seis personas identificados como La Güera, B.J.G.A., La Diabla, Rulo, Pitbull y La Gress.
La indagatoria apunta que estos cuerpos fueron resultados de una pugna entre La Güera y un sujeto de nombre El Padrino, integrante de la agrupación de “Bucanas”.
Si bien La Güera y sus cómplices fueron asesinados y cremados, lo ciertos que se intentó tomar venganza. Para ello, Cristian Uriel “N”, alias El Cristian, fue identificado como el joven que habría alertado a los pistoleros de la presencia de alias Kiko y alias Oso, en el bar “Bling-Bling”.
También se informó que esa noche “momentos después, Irvin Adonay “N”, alias Pinky, y dos sujetos más, llegaron al sitio a bordo de un vehículo compacto, color rojo. Dos de ellos habrían detonado armas de fuego contra las víctimas”.
Se presume que “Cristian Uriel “N”, alias El Cristian, mantenía lazos de amistad con los integrantes del grupo agresor y con las víctimas de ambos eventos, y valiéndose de esa relación de confianza, informó sobre la localización de alias La Güera, por lo que respecta al evento de Jilotepec, así como la de alias Oso, Gory y Kiko, en el ataque al “Bar Bling Bling” de Cuautitlán Izcalli. Alias El Cristian incluso acudió al velorio de alias Gory”.
¿Qué arroja la investigación central?
La investigación permitió identificar como probable responsable de ambos eventos a una célula criminal dirigida por Juan Carlos “N”, alias Remington, y Juan Cristóbal “N”, alias Juárez, conformada por Cristopher “N”, alias Padrino, Irvin Adonay alias Pinky, Cristian Uriel, alias El Cristian, y Guillermo “N”, alias el Tyson, y que operaba bajo las órdenes de Ismael “N”, alias Buchannas.
Alias Buchannas es considerado un generador de violencia de alto impacto y, por ende, objetivo relevante para las autoridades, además, se sabe que estuvo en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Ecatepec y que en diciembre de 2023 fue absuelto por un homicidio registrado en agosto de 2019.
Las actividades de esta célula eran la venta de narcóticos como mariguana, cocaína, piedra, cristal y otras sustancias ilegales, entre ella “lemon”, un derivado de la mariguana, modificada con colorantes y saborizantes.
Para ellos utilizaban servicio de mensajería y taxis de aplicación, mientras que el lado era hecho por medio de transferencias electrónicas.
También se informó la detención de Christian Uriel “N”, alias el Cristian, Irvin Adonay “N”, alias Pinky, y Guillermo “N”, alias Tyson, sin embargo, hasta el momento, no hay más información por parte de las autoridades.
Llegó la audiencia, pero nadie es presentado
El domingo 17 fue celebrada una audiencia en la sede de Cuautitlán. De acuerdo con información del Poder Judicial del Estado de México (PJEM), se impuso prisión preventiva justificada a Juan Carlos “N” y a Óscar “N” por delitos contra la salud en su modalidad de narcomenudeo, en su hipótesis de posesión con fines de suministro y de cartuchos de uso exclusivo del Ejército.
En el caso particular de Juan Carlos “N”, también es investigado por su probable intervención en el delito de homicidio calificado en grado de tentativa, en agravio de ocho policías de investigación, pero no por las seis víctimas el bar “Bling-Bling”.
Sobre Juan “N”, Edith “N” y Ana “N”, también fueron detenidos por narcomenudeo en su hipótesis de posesión con fines de suministro y posesión de cartuchos de uso exclusivo del Ejército, pero fueron puestos en libertad condicional por sus características.
Uno de los detenidos que informó la Fiscalía sería Irvin Adonay “N”, alias Pinky, quien también estaría relacionado con la masacre y dos pistoleros más, pero hasta el momento, no se ha referido su estatus.
Detienen al “cerebro”, pero a ningún agresor
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) celebró la detención de Ismael “N”, el supuesto agresor y autor intelectual de la masacre del bar.
La detención, informaron, fue por un cateo en Metlatoyuca, Puebla, en el que participaron en un operativo la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Secretaría de Marina (Semar), la Fiscalía General de la República (FGR), Guardia Nacional y FGJEM.
En el lugar detuvieron a Ismael “N”, alias Bucanas, y a Yolanda "N", quienes tenían en su posesión armas de fuego cortas y largas, sustancia similar a la cocaína y equipos telefónicos.
Él fue identificado como “líder de una célula delictiva independiente que opera en diversos municipios del Estado de México, Puebla y la Ciudad de México”, es decir, su rango criminal era metropolitano ya que se le relacionan con actos como venta de droga al menudeo, extorsión al transporte público, robo de hidrocarburo, homicidios, entre otros.
También informaron que fue identificado como el autor intelectual de la masacre en el bar. Se tuvo conocimiento que esta persona presuntamente habría ordenado el ataque al centro nocturno, derivado de una disputa con otra organización por el control de la venta de droga y zonas de operación, el cual mantuvo comunicación con los responsables de realizar los disparos el día de los hechos”.
Siguen prófugos 4 sospechosos
Las autoridades han reconocido que parte de estas células criminales tenían influencia metropolitana y si bien el presunto autor intelectual, fue detenido en el estado de Puebla, lo cierto es que ya hay cuatro objetivos que son investigados por las autoridades y que el rango de captura se extiende a diversos estados.
Cristóbal Castañeda, el secretario de seguridad estatal, indicó el pasado viernes 15 de noviembre que trabajarían con otras corporaciones el fin de dar captura a estos sujetos.
“Faltan cuatro elementos que todavía están pendientes de ubicar, pero afortunadamente la mayor cantidad y las cabezas ya fueron detenidas… No solamente en la Ciudad de México, sino se extiende, lamentablemente lo que buscan es sustraerse de la acción de la justicia”.
Hasta ahora, la Fiscalía estatal celebró la identificación de dos células criminales dedicadas al narcomenudeo, sin embargo, a más de una semana, no hay información por parte de las autoridades sobre el estatus del responsable material del multihomicidio de 6 personas en Cuautitlán Izcalli, es decir, quienes accionaron sus armas y asesinaron a este grupo, pueden continuar libres en las calles.
MO