Los hermanos Noé e Israel Cañas Ovalle –integrantes de la banda de La Flor- fueron sentenciados a más de 100 años de prisión, por su responsabilidad en los delitos de privación ilegal de la libertad y secuestro, ambos agravados.
Este grupo delictivo – también conocido como Los Petricolet, porque era encabezado por Abel Silva Petriciolet, El Dicaprio – estaba conformado principalmente por ex agentes policiales. A la banda se le relaciona con al menos ocho secuestros, entre éstos el de Fernando Martí, hijo del empresario Alejandro Martí, en junio de 2008.
Este miércoles, el vocero de la Fiscalía de la Ciudad de México, Ulises Lara, dio a conocer que un juez penal dictó una condena de 131 años, cinco meses y 15 días de prisión, contra Noé Cañas Ovalle, mientras que su hermano Israel recibió una pena de 113 años con cuatro meses de cárcel.
“En el caso de Noé 'N', fue sentenciado por la comisión de los delitos de privación ilegal de la libertad agravada, en perjuicio de un hombre, así como secuestro agravado, en detrimento de otro hombre y una mujer. En lo que se refiere a Israel “N”, se le condenó por la comisión del delito de secuestro agravado, también en perjuicio de un hombre y una mujer.
“Es importante señalar que tanto a Noé “N” como a Israel “N”, se les relaciona como integrantes del grupo delictivo conocido como “La Flor”, dedicado principalmente a actividades delictivas como el secuestro”, destacó.
En un mensaje a medios, Lara López detalló que, de acuerdo con los antecedentes de la Fiscalía, en agosto de 2002 la víctima del primer secuestro arribó a bordo de su vehículo a un centro comercial ubicado en la avenida Aztecas, en la alcaldía Coyoacán, donde se quedó de ver con otra persona, actualmente presa.
Al llegar cerca del estacionamiento, arribó otro hombre armado, de identidad desconocida, quien les ordenó a ambos ingresar al vehículo.
Casi simultáneamente, llegó Noé Cañas, quien se colocó en la parte trasera de la unidad vehicular, portando un arma de fuego. Se dirigieron a una casa de seguridad que se encontraba a las afueras de la ciudad.
“De acuerdo con los elementos de prueba recabados y presentados por nuestros ministerios públicos, en ese lugar dijeron a la víctima que para su rescate solicitarían una gran cantidad de dinero, pero al negociar con la familia en un primer momento, únicamente se entregó una cantidad parcial.
“Al haber transcurrido tres días de su privación de la libertad, el agraviado solicitó lo dejaran ir, ya que sería la única manera para pagar el rescate completo, por lo que los individuos lo amenazaron que si no regresaba privarían de la vida a su amigo, por lo que posteriormente se entregó una suma mayor y el otro supuesto agraviado, quien simuló ser víctima, fue liberado días después”, explicó.
Ulises Lara agregó que el segundo caso ocurrió en agosto de 2008, cuando una mujer y un hombre se encontraban a bordo de un vehículo, en el centro de Tlalpan. Israel Cañas se acercó y los amagó con un arma de fuego, obligándolos a que se pasaran a la parte trasera del auto.
Israel condujo el vehículo hacia una casa de seguridad. En el camino las víctimas fueron agredidas físicamente y despojadas de sus pertenencias, por otros dos hombres que abordaron la unidad.
“Al llegar a la primera casa de seguridad, un edificio de color amarillo, subieron a un cuarto nivel, donde los esperaban otros individuos, entre ellos Noé “N”.
La indagatoria señala que posteriormente los agraviados fueron llevados a un segundo domicilio, pero al no poder negociar con la familia, les señalaron que solamente uno de los dos se podría ir, siendo el agraviado puesto en libertad, ya que era quien podría conseguirles el dinero que pedían por sus rescates. Días después, luego de entregarse una cantidad menor a la solicitada, la segunda víctima fue liberada”, añadió.
Ulises Lara agregó que el juez ordenó a los hermanos Cañas Ovalle el pago de multas y de la reparación del daño a las víctimas.
DMZ