Sistema penitenciario de Tamaulipas, el peor del país

La calificación que le dio la CNDH es de 4.92, el último en la tabla nacional, por deficiencias encontradas en sus cinco reclusorios.

Centro Penitenciario. (José Luis Tapia)
Edith Álvarez
Tamaulipas /

El sistema penitenciario de Tamaulipas tuvo la calificación más baja del país, de acuerdo con el reporte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Los 4.92 puntos obtenidos le dan el último lugar en la tabla de los 32 estados evaluados, derivado de las deficiencias que encontraron en las revisiones hechas en 2018. El año pasado, los penales de Tamaulipas obtuvieron una calificación de 4.71 pero estuvieron en tercer lugar.

El Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) 2018, se realizó en los cinco Centros de Ejecución de Sanciones (Cedes) de Tamaulipas, siendo el de Ciudad Victoria el que tuvo la peor calificación, mientras que el de Altamira, que por primera vez se incluyó en la revisión, fue el mejor evaluado.

El reporte indica que las visitas del personal de la CNDH a los penales de Tamaulipas se hicieron el 15 de agosto y del 24 al 28 de septiembre del año pasado.

En el DNSP, 8 entidades están marcadas en color rojo, encabezando la lista Tamaulipas con 4.92 de calificación, seguido de Baja California sur con 4.95, Nayarit con 4.99, Guerrero con 5.17, Hidalgo con 5.28, Zacatecas con 5.53, Sinaloa con 5.62 y Veracruz con 5.87 puntos. Otros 21 estados se ubican en color amarillo por sus calificaciones entre 6.0 y 8.0.

Solo tres están en color verde y sus calificaciones son por arriba de 8.1 a 10. Se trata de Coahuila, Querétaro y Guanajuato, pero ninguno alcanza el nivel máximo, se quedan en 8.01, 8.21 y 8.21 respectivamente. El promedio nacional es de 6.45 puntos.

La calificación general de Tamaulipas, se obtiene de las revisiones hechas en cada uno de sus cinco penales estatales.

El de Matamoros obtuvo 4.81 puntos; el de Reynosa, tuvo 4.92; el de Nuevo Laredo, 5.03; el de Ciudad Victoria, 4.68 y el de Altamira, 5.17 puntos.

El DNSP evalúa cinco aspectos: garantía de integridad personal del interno, estancia digna, condiciones de gobernabilidad, reinserción social del interno y grupos de internos con requerimientos específicos.

En las principales deficiencias están: separación entre hombres y mujeres; y en los servicios de salud; hay insuficiencia de programas para la prevención y atención de incidentes violentos; y de vías para la remisión de quejas de probables violaciones a los derechos humanos.

También se tienen deficiencias en: las condiciones materiales e higiene de instalaciones para alojar a internos; y en la alimentación; así como inexistencia o deficientes condiciones materiales e higiene de la cocina y/o comedores.

Además hay insuficiencia de personal de seguridad y custodia; deficiencias en el procedimiento para la imposición de las sanciones disciplinarias; ejercicio de funciones de autoridad por reos; condiciones de autogobierno/cogobierno; presencia de actividades ilícitas.

A esto se le suma una deficiente separación entre procesados y sentenciados; y deficiente atención a personas adultas mayores, a mujeres y/o menores que vivan con ellas, a personas con discapacidad; e insuficiencia en los programas para la prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria.

Cabe mencionar que el penal de Ciudad Victoria está sobre poblado, pues tiene una capacidad para 835 hombres y 65 mujeres, pero tiene una población de 905 hombres y 84 mujeres, mientras que el de Altamira supera su capacidad para mujeres que es de 26 mujeres pero tiene 38 en sus celdas. Los demás están por debajo de su capacidad.

En total el sistema penitenciario tiene espacio para 6 mil 901 y hay 4 mil 803 reos en los cinco penales de Tamaulipas.


ELGH 

LAS MÁS VISTAS