La Procuraduría de Justicia capitalina cuenta con evidencia registrada en video de que poco después de la ejecución de dos ciudadanos israelíes en Plaza Artz, un tercer sujeto ingresó al restaurante y se llevó un maletín presuntamente propiedad de las víctimas.
Autoridades de la dependencia comentaron que investigan si este individuo era una persona cercana a Binyamin Yeshuron Sutchi y Alon Azulay.
Sin embargo, en las imágenes se observa que no reaccionó para intentar protegerlos durante el atentado a tiros que perpetraron Mauricio Hiram “S”, El Mawicho, y Esperanza “G” por órdenes del cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) la tarde del 24 de julio pasado.
De acuerdo con la indagatoria, en el caso de Vanessa Ballar, La Güera, la procuraduría busca a dos personas que la ayudaron a salir de la plaza comercial para luego escapar en dos autos.
Una de las pistas de la procuraduría para esclarecer el doble asesinato es el maletín que los detectives sospechan que “contenía algo relevante” y que el conocido de los israelíes recuperó y se llevó momentos después del asesinato.
En las imágenes se observa la sustracción del mismo, de lo que difícilmente se percataron meseros y comensales, ya que estos se arrojaron al piso o se protegieron al escuchar los disparos.
Este video junto con otras imágenes fueron entregadas a las autoridades capitalinas.
En otra secuencia obtenida de cámaras de particulares y del C5 de Ciudad de México también se cuenta con la media filiación de los sujetos que efectuaron disparos en el acceso a Plaza Artz.
Se trata de los delincuentes que participaron en una maniobra de distracción que serviría para abrir paso a El Mawicho y Esperanza, a fin de escapar juntos en un automóvil Kia azul.
Sin embargo, dos de los copartícipes se vieron obligados a escapar en este vehículo (días después hallado en San Nicolás Totolapan, en Magdalena Contreras) sin Mauricio Hiram ni Esperanza.
El motivo fue que de manera inesperada llegó al lugar una patrulla, cuyos tripulantes fueron alertados por los disparos.
Esto modificó el plan y obligó a que El Mawicho y la mujer tomaran rutas distintas; ella fue detenida cuando corría sobre la lateral de Periférico, donde arrojó una subametralladora y una peluca con la que planeaba disfrazarse.
El Mawicho logró evadir a las autoridades, lo mismo que La Güera y dos personas que la apoyaron primero a refugiarse en los sanitarios de la plaza, donde permaneció varios minutos.
Las pesquisas revelan que cuando las autoridades llegaron para acordonar la zona de los asesinatos, Vanesa Ballar aprovechó para bajar al sótano y huir a bordo de una camioneta tipo Mazda.
La Güera tiene ficha roja de búsqueda emitida por Interpol; es pieza clave para resolver el crimen, ya que se presume que fue la coordinadora.