Una llamada anónima al sistema de emergencias 911, en la que se denunciaron olores fétidos frente a una funeraria, provocó la clausura del establecimiento, ya que no contaba con las medidas de seguridad e higiene que exige el reglamento.
El negocio se ubica en la calle Ildefonso Fuentes, entre avenida Hidalgo y Allende, en el sector centro de la ciudad de Torreón, Coahuila, a donde inicialmente arribaron elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal y de otras dependencias policiacas, tras el reporte de olores fétidos y encharcamiento de agua con tinte rojo, presuntamente sangre humana, que emanaba por la tapa de la alcantarilla del negocio denominado Servicios Funerarios Casa La Esperanza.
Al corroborar la versión de la llamada telefónica, se solicitó la presencia de personal de Protección Civil Región Laguna, a cargo de la licenciada Claudia Verónica González, así como de la Secretaría de Salud y de una dependencia municipal.
Intervención de autoridades
Los servidores públicos se mantuvieron a la expectativa en el exterior de la funeraria, ya que al interior se encontraban dos servicios funerarios en proceso, motivo por el cual se esperó el desalojo del inmueble para proceder conforme al protocolo establecido.
Durante la revisión se confirmó que el establecimiento no cumplía con las condiciones necesarias de higiene y seguridad, situación que representaba un riesgo tanto para los trabajadores como para la población en general, lo que derivó en la determinación de clausurar el lugar de manera preventiva.
Las autoridades informaron que la medida se mantendrá vigente hasta que el propietario regularice la situación y cumpla con lo establecido en el reglamento que rige este tipo de establecimientos.
Clausura y seguimiento
La clausura se llevó a cabo una vez que el inmueble fue desalojado en su totalidad, colocando los sellos correspondientes y notificando al propietario sobre las observaciones detectadas durante la inspección.
Se indicó que será responsabilidad del dueño atender las recomendaciones emitidas por las autoridades competentes y corregir las irregularidades señaladas para poder reanudar operaciones, siempre y cuando se garantice el cumplimiento de las normas sanitarias.
Finalmente, las autoridades reiteraron el llamado a la ciudadanía para denunciar cualquier situación que represente un riesgo a la salud pública, a fin de que se puedan realizar las inspecciones necesarias y prevenir posibles afectaciones.
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