Vestidos como custodios y cruzando al menos seis filtros de seguridad, dos reos de alta peligrosidad se fugaron esta madrugada por la puerta principal del Centro Penitenciario de Aguaruto en Culiacán, informó el secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Fermín Hernández Montealegre.
Explicó que a las 3:05 horas personal del centro de comando C-4 detectó en las cámaras del penal movimiento anormal de custodios, por lo que pidió información al área de seguridad, la cual se limitó a señalar que era el cambio de turno de dicho personal de vigilancia.
Sin embargo, al revisar que salían más custodios de los reportados y al ver que llegaban varios vehículos a las afueras del centro de reclusión, desde el centro de mando de la Secretaría de Seguridad, se activó el protocolo ante una posible evasión de internos.
De inmediato se hizo el pase de lista y se detectó la ausencia de dos internos, ambos procesados por delitos federales.
Se trata de Julián Grimaldi Paredes, quien fue detenido el pasado 18 de febrero en una fiesta cerca de sector Santa Fe en Culiacán, y quien presuntamente participó en la emboscada a los militares que trasladaban a un sicario la madrugada del 30 de septiembre y en la que murieron cinco soldados y 10 más resultaron lesionados.
El otro preso evadido es Carlos Jesús Salmón Higuera, preso desde el 28 de febrero de 2016, acusado de participar en un ataque el 9 de julio de 2012 en la comunidad de Tetamboca, en el municipio de El Fuerte, donde fueron asesinados siete policías ministeriales y cuatro más resultaron heridos.
El secretario de Seguridad Pública de Sinaloa señaló que ambos, por ser de alta peligrosidad, ya habían sido trasladados a penales federales, pero jueces de distritos otorgaron amparos para que volvieran al penal de Culiacán, que no cuenta con las medidas necesarias. Incluso, se les había adaptado un área que diera mayor certeza de seguridad.
A Julián Grimaldi Paredes se le había enviado el 14 de abril de este año a un penal federal en el estado de Veracruz, pero fue reingresado en mayo al penal de la capital sinaloense.
Carlos Jesús Salmón Higuera, por su parte, había sido trasladado primero al Cefereso de Guasave el 6 de marzo de 2016 y luego a un penal de Veracruz en junio de ese mismo año, pero fue reingresado a Culiacán en junio del 2017.
A pesar de que el gobierno estatal hizo la solicitud formal para que ambos fueran trasladados a penales de máxima seguridad, nunca recibieron respuesta.
De hecho, de los 2 mil 253 internos en el penal de Culiacán, 580 están procesados por delitos del orden federal.
Hernández Montealegre señaló que la PGR investiga el caso para deslindar responsabilidades, tomando en cuenta que los reos fugados huyeron por la puerta principal y en compañía de dos custodios más.
Al respecto, el gobernador dijo que es inaceptable la fuga de dos reos del Penal de Culiacán y expresó que todos los esfuerzos del Estado, a través de los cuerpos de seguridad e inteligencia, están enfocados en la recaptura de los internos evadidos.
En un comunicado, advirtió que si alguien facilitó la evasión de los reos deberá asumir las consecuencias, pues no se puede tolerar que quede impune en ese posible actuar que raya en la deslealtad, complicidad y traición al compromiso con la ciudadanía.
jbh