Fue a través de las noticias de los medios, por internet y por las llamadas de conocidos como los familiares de los internos del Centro Federal de Readaptación Social Número 2 Occidente se enteraron de que ese centro penitenciario, ubicado en Puente Grande, Jalisco, cerrará de manera definitiva.
La madrugada de ayer fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se ordena el cierre del penal y el traslado de todos los internos a otros centros federales de readaptación social.
“Ni siquiera nos ha dicho el penal al que los van a trasladar. Nos enteramos por las noticias”, comenta el hermano de un interno del Cefereso 2. “No nos han dicho, y no nos van a decir nada”, afirmó anoche Héctor, quien omite su apellido y de su familiar preso.
Ayer por la tarde acudió a las instalaciones de ese Cefereso para conseguir información del traslado de su hermano, pero no lo dejaron ingresar.
“El oficial dice que desconocía lo que está sucediendo y en sí, hay mucha desinformación (...) no nos pueden decir nada concreto, ni a dónde los van a trasladar ni qué es lo que va a suceder”, explica.
Dolor de madre
“Estoy muy inconforme”, reclama una mujer que tiene a un hijo internado en el penal ubicado en Jalisco.
“Tenemos el proceso aquí en el estado y si de por sí son muy lentos todos los trámites en los juzgados (...) imagínate las notificaciones para otros estados” se queja.
El hijo de Marisol fue trasladado de Tijuana, Baja California, al penal de Puente Grande hace 12 años y entonces su madre tomó la decisión de mudarse a la Zona Metropolitana de Guadalajara para poder visitarlo cada semana. Ahora, con el cierre del penal, le invade un sentimiento de incertidumbre porque no sabe adónde llevarán a su hijo.
“Es mi hijo y no lo voy a abandonar. A donde vaya, ahí voy a estar. Pero el problema es que no sabe uno dónde (...) no te informan hasta cuando ya los llevan en camino y ni siquiera tampoco, hasta después de meses”.
Aproximadamente mil 900 internos serán trasladados del penal de Puente Grande a otros centros penitenciarios federales pero, hasta anoche, se desconocía a qué otros centros serán reubicados.