El acomodo actual de las fuerzas políticas en Quintana Roo podría beneficiar a Morena en la elección a gobernador del 2022. El partido político del Presidente de México se ha fortalecido en la entidad por diversos factores: desde 2018, el llamado efecto Andrés Manuel López Obrador; el hartazgo de la corrupción de los anteriores gobernantes; el aglutinamiento de políticos reciclados de otros partidos, principalmente del PRI y del PRD, y la alianza con el Partido Verde, que tiene un peso importante en la entidad.
En eso coindicen analistas políticos y activistas ciudadanos consultados por MILENIO, quienes además aseguran que, de entre los cinco precandidatos que Morena anunció, Mara Lezama, actual presidenta municipal de Benito Juárez, podría ser la abanderada de ese partido político a la gubernatura, pues aparentemente es quien más goza de las simpatías de López Obrador.
De los cinco precandidatos de Morena, Mara Lezama es, dicen los personajes consultados, la que menos trayectoria política tiene, lo cual se vería como una ventaja porque no es un personaje “reciclado”.
Mara Lezama tiene menos trayectoria política. | Foto: Jorge González
Lezama, actual alcaldesa morenista de la ciudad más grande del estado, ha construido su carrera política a partir de su profesión de periodista y locutora, lo que le dio una popularidad y un reconocimiento entre los habitantes que no tienen sus contrincantes internos.
Los otros cuatro son el reflejo del reciclaje de políticos que se ha vivido al interior de Morena, consideran los entrevistados.
El senador José Luis Pech, aunque amigo cercano de López Obrador, es un viejo político priista que además de diversos cargos políticos menores, fue cuatro veces secretario en la entidad ─de Gobierno, Hacienda, Educación y Turismo─, durante los gobiernos del tricolor entre 1992 y 2005, así como rector de la Universidad de Quintana Roo en 2011. Consideran que sólo tiene fuerza en el sur de la entidad.
Senador José Luis Pech | Facebook
La senadora Marybel Villegas ha recorrido todo el espectro político, pues se ha postulado a cargos de elección popular desde el PRD, el PAN, el PRI, y finalmente, Morena.
Los otros precandidatos de Morena son Laura Beristain, proveniente del PRD, hermana de Luz María, política presuntamente cercana al ex gobernador priista Félix González Canto, y Luis Alegre, hijo del magnate de medios en la entidad, Gastón Alegre, quienes no tendrían tantas posibilidades de ser elegidos abanderados.
Laura Beristain | Foto: Jesús Quintanar
Las piezas de Félix González
Para esta elección, algunos prevén que Marybel Villegas no tendrá la posibilidad de encabezar la candidatura de Morena, lo cual podría resultar en una escisión del partido y un escenario interesante.
“Marybel Villegas, senadora de Morena, es gente del ex gobernador Félix González Canto, de toda la vida. Entonces, imagínate un escenario en el que Marybel se presentara con el PT y Movimiento Ciudadano, en el que Morena se presentara con Mara, y Laura Fernández, por el PAN, PRI, PRD. Félix González Canto tendría a dos candidatas, a Marybel y a Laura. Y no sería un camino de rosas para Morena, con una división de ese tipo”, dice el profesor Carlos Barrachina, analista político de la entidad.
Senadora Marybel Villegas. | Foto: Jesús Quintanar
Para él, el rol todavía activo de González Canto, gobernador entre el 2005 y el 2011, será un factor a considerar en el juego político del próximo año.
“Félix sigue moviendo todo en Quintana Roo, es un tipo tremendamente inteligente y que maneja absolutamente todo en todos los grados; está con Movimiento Ciudadano, está con Morena, está con el Verde, está con el PRI, por supuesto”, dice el analista.“Ahora lo que se está escuchando es que tuvieron la intención de parte del grupo de Félix de que Laura Fernández, actual diputada federal, dejara el Verde y encabezara la coalición de PAN-PRI-PRD para la gubernatura”, añade.
El poder del Verde
No sólo la mano de González Canto será un factor que intervendría en el juego del 2022, pues, algunos activistas ciudadanos afirman que en Quintana Roo, “la mano de El Niño Verde sigue vigente”.
A Mara Lezama, la apoyaría el Partido Verde, aliado a nivel nacional de Morena y del presidente López Obrador.
Desde antes de que Morena llegara a Cancún, el Verde ya mandaba ahí.
En 2013, en la segunda mitad del gobierno de Roberto Borge, el ayuntamiento de Benito Juárez lo ganó Remberto Estrada, amigo cercano de Jorge Emilio González, El Niño Verde, hijo del fundador del Partido Verde, con quien se vivieron episodios de escándalo por corrupción y ejecuciones en el municipio.
El Verde ha sido el refugio de muchos de los priistas del pasado que ahora, por conveniencia, apoyan a Morena.
“Hay gente de Roberto Borge Angulo y Félix González Canto en el Verde”, dice el profesor Barrachina, quien dice que la mayor fuerza del Verde es en el norte de la entidad, en Cancún y Puerto Morelos, principalmente.
Hoy, la conformación del equipo de trabajo de Mara Lezama en el ayuntamiento de Benito Juárez, en el que por cierto fue reelegida en junio pasado, permite ver que tendrá el apoyo del Partido Verde para la candidatura al gobierno estatal, pues este instituto político tiene diversas posiciones importantes en la estructura del gobierno municipal.
“Cuando Mara pida licencia, porque probablemente va a ser la candidata, su suplente, Ana Patricia Peralta, será del Verde, además de que el síndico, Pablo Bustamante, también es del Verde; es decir, tienen toda su estructura”, afirma.
PAN y PRD, diluidos
De acuerdo con las perspectivas que algunos quintanarroenses tienen del escenario que se vivirá el próximo año en la entidad, no existen posibilidades reales de que el PRD o el PAN, los partidos con los que el actual gobernador, el ex priista Carlos Joaquín González, ganó en 2016, puedan repetir la hazaña.
“El PAN y el PRD nunca han tenido estructura partidaria; el PAN, un poquito más. Tienen élites, pero no tienen quién vaya detrás, a menos que les paguen en la campaña; en ese momento sí”, explica Barrachina.
“El PAN y el PRD son igual de fuertes hoy a como lo fueron en la elección de 2016”, dice irónicamente otro personaje político de la entidad, que pidió no revelar su nombre.“En realidad, la elección la ganó la persona, la ganó Carlos Joaquín por circunstancia de hartazgo social, pero si hubiera ido con el partido negro o el partido inexistente, hubiera ganado”, añade.
Carlos Joaquín González, gobernador de Quintana Roo | Archivo
Por su parte, el rol que jugará Carlos Joaquín el próximo año, coinciden, será el de dejar el paso libre a Morena, el partido del Presidente, como ya lo hizo en Benito Juárez, donde ganó Mara Lezama dos veces.
Al gobernador, por cierto, ya lo invitó el presidente López Obrador a sumarse al gobierno federal; “por eso ya está, desde hace meses, suavecito y cooperando”, dice uno de los analistas.
Por otra parte, aunque en algún momento, el PRD tuvo fuerza en Cancún, Benito Juárez, de donde tuvo a dos presidentes municipales, Gregorio Sánchez y Julián Ricalde, entre 2008 y 2013, actualmente ya no tienen un peso importante.
“El partido que sí tenía mayor impacto en Benito Juárez era el PRD, era una fuerza importante; sin embargo, se fue debilitando con el tiempo y la alianza con el PAN le hizo daño, pues en términos de siglado, en la boleta, lo primero que la gente veía era al PAN y el PAN obtuvo más votos que el PRD en la elección pasada para gobernador; eso hizo que se fuera disminuyendo la presencia del PRD”, añade una de las fuentes consultadas.
El Diamante Negro
No obstante, un nuevo personaje surgió recientemente en el escenario político: el actor y empresario Roberto Palazuelos, quien tiene varios hoteles y propiedades en la entidad.
Hace unas semanas, se dio a conocer que Palazuelos sería el abanderado de la alianza Va por México, del PRI-PAN-PRD, una coalición impulsada por los empresarios Claudio X. González y Gustavo de Hoyos, partidos que en la entidad no tienen cuadros ni militancia fuertes.
”Yo voy a ser el gobernador si estoy en la boleta, que no te quede la menor duda. Soy la persona más preparada para los problemas que enfrenta Quintana Roo en este momento”, declaró a mediados de noviembre.
“De que quiero estar en la boleta, quiero estar en la boleta; y esté o no, ya sabes que en política nada es cierto hasta que es cierto”, dijo.
Para activistas ciudadanos en la entidad, la postulación de Palazuelos no es tan descabellada, aunque no sería lo más afortunado que ganara.
“Lo peor es que sí tiene posibilidad. Yo creo que sí, porque es un rollo aspiracional, porque es un empresario grande, porque tiene la popularidad, la gente lo conoce, muchas veces nada más basta con que la gente identifique el nombre como para que voten por él. Si se juntan varios detrás de él, seguramente”, dijo un integrante de una ONG, que prefirió el anonimato.
El PRI, quemadísimo
El PRI, por otra parte, aunque conserva algunas posiciones de poder, es una fuerza política “quemadísima” en la entidad, debido a la herencia de corrupción que dejó Roberto Borge Angulo, ex gobernador hoy preso, acusado de lavado de dinero, peculado, aprovechamiento ilícito del poder y desempeño irregular de la función pública.
“El PRI es cada vez más chiquito. El exceso en este estado con el PRI fue más allá de lo imaginable. Regresar para ellos es muy difícil”, dice una activista de la entidad, que también pidió no citar su nombre.
“Muchos se fueron a Morena, como Marybel Villegas, otros se dispersaron en lo que se bajan las aguas y otros que no sé, a lo mejor siguen escondidos mientras sigue Carlos Joaquín en el poder, porque todavía siguen juicios abiertos para la gente cercana de Borge”, añadió la fuente consultada.
JLMR