Alfonso Romo, quien hasta hoy fue jefe de la Oficina de la Presidencia, aseguró que su salida del cargo obedece al cumplimiento de un acuerdo entre él y el presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien dijo que seguirá apoyando desde afuera, pues afirmó que seguirá siendo un puente entre el gobierno federal y el sector privado.
"Cuando acepté estar en el gabinete le dije: 'mira, Presidente no es mi vocación, no soy funcionario público, yo entiendo al sector privado pero con gusto te ayudo pero por dos años, y así lo convenimos'", recordó Romo.
En entrevista con Azucena Uresti para MILENIO Televisión, Romo descartó que haya sorpresas o pleito con el Presidente ante su separación del gabinete federal; asimismo, aseveró que no se despide, pues se mantendrá como enlace entre gobierno y empresarios.
"Ha sido un proceso que fue planeado desde el principio, ha ido evolucionado y lo hemos platicado en los últimos dos meses: no hay sorpresa, no hay pleito, no hay nada más lo que te acabo de mencionar", expresó Romo.
Romo aseguró que no se despide, pues seguirá haciendo lo mismo: ser enlace del sector privado con el gobierno del presidente López Obrador desde la figura de asesor.
AMLO y yo nos conocemos perfectamente
El empresario aseguró que su relación con López Obrador es de mucha confianza y mucha química entre ambos e hizo un llamado a no perder el entusiasmo y ánimo.
"Nos llevamos muy bien, hicimos mucha química, nos conocemos perfectamente, nos tenemos mucha confianza, estoy encantado de seguir ayudándolo y eso me motiva a seguir ayudando", explicó.
El empresario dijo que son muy buenos amigos y aunque hay diferencias, existe la confianza para dirimirlas y reveló que la comida de esta tarde con él y la escritora Beatriz Gutiérrez fue una linda despedida.
Me encantó influir en la vida de miles
El empresario aseguró que tras su salida no olvidará ni críticas o aciertos, de las primeras, apuntó, hay muy buenas de las que se aprende al igual que para no cometer los mismos errores.
Romo calificó estar al frente en la Oficina de la Presidencia como una extraordinaria experiencia: "yo nunca había sentido la satisfacción de influir en la vida de miles, el Presidente me dio esa oportunidad, la tomé, me encantó pero tengo que aceptar que mi campo es otro".
No me estoy yendo, me encargaré de lo mismo pero fuera del gobierno
Romo descartó despedirse pues seguirá apoyando al Presidente de la República siendo enlace con el sector privado pero sin pertenecer al gobierno federal.
“Siempre dije dos años, lo cumplí. No es lo mismo ser asesor que jefe de la oficina de la Presidencia porque tengo un reto doble: me tengo que ganar la misma confianza del sector empresarial y del gobierno desde afuera.
Estoy completamente convencido de lo que el Presidente anunció, estoy contento de volver a mi sector, pero estoy más contento de poder ayudar a mi sector habiendo conocido el sector público desde adentro, creo que puedo ayudar porque conozco ambos lados de la moneda”.
Más adelante aseguró que se va tanto con críticas como con los aciertos, “de las críticas hay unas muy positivas de las que se aprende, y otras también pero para no repetirlas". Respecto a los logros dejó que la ciudadanía, el sector empresarial y el gabinete lo evalúen.
Cuestionado sobre el nerviosismo de algunos integrantes del sector empresarial por su salida, sostuvo que el Presidente tiene una red amplia de interlocutores a quienes les tiene confianza y se nutre de la información brindada por ellos.
Alfonso Romo reconoció que dentro del gabinete hay tantas opiniones y corrientes técnicas e ideológicas lo que hace "intenso negociar a diario para seguir la mejor ruta para el país" y añadió la existencia de diferencias en los cómos pero no en los qué.
El empresario dijo que dadas las condiciones financieras del país, de CFE o Pemex, el sector empresarial puede jugar un sector más dinámico en la inversión requerida para fortalecerlos y aunque algunos proyectos no culminaron, “el camino va caminando y es más lento del que uno piensa”.
Además, frente a la crisis que ha dejado la pandemia en México, así como una parálisis económica mundial, el empresario sostuvo que es necesario que haya “cero barreras para la inversión”, para crear empleos y bienestar.
“Necesitamos olvidarnos de las diferencias y hoy todos a crecer, todos a crear empleos, todos a crear riqueza porque si no, no salimos”.
JLMR