Como presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno ha perdido en tres años 10 gubernaturas. En ese contexto, su partido enfrentará los comicios de 2023, en los que estarán en disputa los dos únicos estados que le quedan (Coahuila y Edomex), y la negociación para la candidatura presidencial en 2024.
Durante la gestión de Alito, los principales liderazgos priistas han sido noqueados en sus estados de origen: el propio Moreno perdió Campeche de la mano de su sobrino, Christian Castro Bello; su secretaria general, Carolina Viggiano, que contendió como abanderada de PAN, PRI y PRD, no pudo mantener Hidalgo y ni el presidente de la Fundación Colosio, José Murat, y su hijo, Alejandro, gobernador de Oaxaca, metieron las manos por su territorio.
De acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), en las elecciones del domingo pasado el PRI perdió 180 mil votos en comparación con los sufragios obtenidos en los comicios federales de 2021. Esto le sirvió a Morena para ganar cuatro gubernaturas, a pesar de que el incremento de su votación total fue de solo 1.5 por ciento.
Los priistas lograron sumar 818 mil sufragios en las elecciones para gobernador, lo cual representa un descenso de 18 por ciento con respecto a los 998 mil votos alcanzados el año pasado en los comicios federales.
La crisis del tricolor se profundiza si se le compara con el trecho perdido por sus aliados políticos. El PAN perdió 77 mil sufragios con respecto al año anterior, lo que representa un retroceso de 7 por ciento. El PRD tuvo una disminución de 32 mil votos, equivalentes a una pérdida de simpatías de 20 por ciento.
Los candidatos de Movimiento Ciudadano, en cambio, lograron aumentar su base electoral en casi 60 mil sufragios.
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La mayor pérdida para el PRI se dio en Oaxaca, un estado que históricamente ha entregado buenos resultados para este partido político. Los resultados preliminares muestran que consiguieron 246 mil votos, una cifra menor por 104 mil sufragios a lo que tuvieron los candidatos a la Cámara de Diputados.
De hecho, los votos en favor del PRI solo representan el 21.9 por ciento de las boletas totales, mientras que el candidato de Morena logró obtener el 49.85 por ciento de las preferencias el pasado domingo.
En Quintana Roo también se presentó una baja considerable de los votos en favor del PRI, pues solo pudieron conseguir 14 mil 632 rúbricas, una cifra inferior en 75 por ciento respecto a lo obtenido en 2021. En Tamaulipas también se presentó una caída importante de 49.5 por ciento.
Un escalón abajo se encuentran Hidalgo y Aguascalientes. En la primera entidad la candidata priista, Carolina Viggiano, logró convencer a 247 mil personas, una cifra menor por 39 mil votos a lo que habían registrado el año anterior y que significa una caída de 13.6 por ciento. En Aguascalientes la caída solo fue de 10 mil 6231 votos (-23.3%).
El único estado donde el tricolor pudo incrementar su votación fue Durango. El PREP revela que el abanderado priista, Esteban Villegas, logró obtener 210 mil votos a su favor, una cantidad mayor a los 129 sufragios alcanzados en las elecciones federales; esto significa que en la entidad el PRI subió 62.6 por ciento sus preferencias.
Ante los últimos resultados y en medio de diversos audioescándalos por supuesto uso indebido de recursos públicos, el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno, ha señalado en diversas ocasiones que no piensa en dejar el timón de su partido.
De hecho, recordó en entrevista para MILENIO Televisión que en las elecciones federales los candidatos priistas lograron obtener el 18 por ciento de las preferencias totales; sin embargo, ese número cayó al 15 por ciento en las seis entidades que tuvieron elecciones, pues solo pudieron sumar 818 mil sufragios de los 5.1 millones que se emitieron en la jornada dominical.