María Elena Álvarez-Buylla, directora del Conacyt, está planeando su jugada maestra para resolver la polémica que mantiene ocupada la sede en Santa Fe del Centro de Investigación y Docencia Económicas. Y no implica un diálogo o acercamiento con los alumnos. Es, de hecho, todo lo contrario. Busca quitar facultades a los consejos Directivo y Académico, y fortalecer la toma de decisiones por parte del director general.
Mientras tanto, alumnos mantienen ocupada la entrada a las instalaciones de la sede en Santa Fe, ante el descontento por la selección del director, Jorge Romero Tellaeche. Selección en la que no se les tomó en cuenta, y a pesar de que Romero ni siquiera participó en la comparecencia de candidatos ante la Asamblea Estudiantil.
El titular de la Unidad de Articulación Sectorial y Regional del Conacyt, José Alejandro Díaz Méndez, convocó a los miembros de la Asamblea General de Asociados del CIDE y al comisario público propietario del Sector Educación y Cultura de la Secretaría de la Función Pública a la Primera Sesión Extraordinaria del 2022, en donde plantearán una serie de reformas al Estatuto General del CIDE. La sesión se llevará a cabo el viernes 14 de enero, a las 9 de la mañana, por videoconferencia, de acuerdo con el documento al que tuvo acceso MILENIO.
Díaz Méndez, en calidad de presidente suplente de la Asamblea General de Asociados del CIDE y por instrucciones de Álvarez-Buylla, presentó una propuesta de reforma que modifica la facultad del Consejo Directivo, de formalizar a solo tomar conocimiento del nombramiento del director general del CIDE, así como en el caso de su ratificación para el segundo periodo.
En la propuesta, también en poder de MILENIO, se establece que una vez que la directora general del Conacyt designe y nombre al director general del CIDE, el nombramiento quedará oficializado al momento de presentarse al consejo directivo, sin la necesidad de que este consejo la formalice.
Además se le quitan facultades al Consejo Académico. Solo podrá conocer y opinar sobre el programa anual de trabajo previo a que sea sometido al Director General. Actualmente puede conocer y debe aprobar el programa. Lo mismo para con la creación o suspensión de programas docentes, de unidades académicas y de apoyo. E igual con cualquier modificación a los estatutos de la asociación.
Por otro lado, indica que el secretario de Vinculación solo podrán representar a la institución antes otras instituciones públicas, privadas o sociales a solicitud del director general.
Esta propuesta no viene sino a agitar las aguas en un ambiente de por sí tenso. Los estudiantes que mantienen un campamento afuera de la sede en Santa Fe reclaman que las autoridades y directivos del CIDE se mantienen en silencio y se niegan a dialogar con ellos.
La comunicación con el alumnado ha sido prácticamente con comunicados, y los estudiantes han recibido calificativos como el de “grupos de interés.” Además, el año inició con la incursión del Servicio de Protección Federal a las instalaciones del Centro.
La comunidad estudiantil, mientras tanto, asegura que seguirá al frente del centro de estudios hasta que las autoridades los escuchen y reconozcan como una parte con voz y voto dentro del CIDE.
ledz