Los Jesuitas de México reclamaron que a cinco meses del asesinato de sus hermanos Javier Campos Morales El Gallo y Joaquín Mora Salazar, junto con el guía de turistas Pedro Palma, el caso siga impune y la inseguridad prevalezca en la Sierra Tarahumara.
En un comunicado, la comunidad jesuita lamentó que prevalezca la situación de violencia que cobró la vida de sus compañeros en Chihuahua.
"A más de 150 días de los dolorosos hechos, la paz no ha llegado a Cerocahui, como recientemente declaró la Secretaría de Seguridad Pública Estatal."En la comunidad prevalece la inseguridad, el miedo de que la situación quede en el olvido y de que el perpetrador regrese a la zona. Reiteramos, mientras no haya justicia no se podrá hablar de paz y reconciliación".
Los religiosos hicieron un llamado a los diferentes niveles de gobierno para continuar con la seguridad en el territorio serrano y avanzar hacia la justicia que, dijeron, tanto añoran las comunidades.
El 22 de junio, Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, dos sacerdotes jesuitas de Chihuahua, fueron asesinados en un templo ubicado en el poblado de Cerocahui, municipio de Urique, Chihuahua.
Los sacerdotes fueron asesinados adentro del templo, tras defender a una persona que ingresó al recinto cuando era perseguida por hombres armados, informó Luis Gerardo Moro, provincial de Compañía de Jesús en México.
JLMR