En medio de acusaciones de falta de imparcialidad, de censura y la realización de auditorías a modo, el auditor Especial de Desempeño de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Agustín Caso Raphael, dio a conocer mediante una carta que fue cesado de su cargo por parte del auditor superior, David Colmenares.
En su carta, que fue replicada en redes sociales por Gerardo Lozano Dubernard, ex auditor Especial de Cumplimiento Financiero de la ASF, Caso Raphael acusó a Colmenares de abandonar los principios de autonomía e imparcialidad por la “aspiración claramente ponderada en estos días de hacer política, lo que es incompatible con la responsabilidad de dirigir la Auditoría Superior de la Federación”.
El ahora exauditor especial anunció que interpondrá los recursos jurídicos necesarios para combatir el cese, al que calificó de una decisión arbitraria e ilegal.
“La remoción se hace sin demostrar que se haya incurrido en alguna de las causales establecidas en la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación”, expresó.
Caso aseveró en su carta que “para nadie es un secreto que, de manera cada vez más grave, en la Auditoría Superior de la Federación se ha abdicado del cumplimiento de los principios constitucionales en detrimento de la autonomía e independencia de la función de la fiscalización, lo que se traduce en abandonar o hacer retroceder a los equipos auditores en su misión”.
“Se han dejado de procurar y hacer cumplir los principios de separación de poderes, Estado de derecho, y con ello se ha debilitado no solo a la Auditoría, sino a todas las instituciones públicas que dejan de cumplir con su actividad institucional, la cual emana del mandato constitucional a que están obligados”, acusó.
Además, denunció que “si una simple evaluación incomoda a un funcionario, ésta desaparece. Ya no se diga de la integración del programa anual de auditoría, el cual se ha vuelto una suerte de autocensura, pues no se nos permite incorporar los temas de relevancia nacional”.
Caso también afirmó que hay “intromisión en los enfoques, alcances y resultados, que son sujetas a una revisión que no es técnica, y que sirve al propósito de expulgar cualquier palabra y hallazgo que no sea políticamente funcional en el corto plazo”.
El exauditor dirigió su carta a la ciudadanía en general y a sus compañeros auditores de la ASF, a quienes les recordó, al exponer su caso, que “ustedes deben tener sus propias historias”.
Al dar a conocer la carta en sus redes, el exauditor Lozano Dubernard expresó que “como lo he venido señalando, la ASF ha sido capturada por los intereses políticos de una sola persona, el Auditor Superior de la Federación, quien se ha apropiado de la institución para beneficiar los intereses de unos cuantos de la Clase Política para interferir en los resultados que arrojan las auditorias que practican las Áreas Auditoras”.
Por su parte, la también ex auditora Muna Dora Buchahin comentó en su cuenta de X que el cese de Caso “apunta que Arely Gómez, la exprocuradora y ex secretaria de la Función Pública, que encubrió corrupción y pactó como esa pandilla, como lo narro en La Casa Sucia, llega de auditora especial de desempeño”.
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LMCT