En la recta final del sexenio panista en Tamaulipas, se hicieron pagos a personal del que no se comprobó que realizaran tareas de salud conforme a los sueldos que les fueron cubiertos, así como a trabajadores sin el perfil médico requerido, por lo que la Auditoría Superior de la Federación (ASF), marcó irregularidades por 2.3 millones de pesos, pidiendo devolver esos recursos a la tesorería pública.
El Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (Fassa) fue revisado por el organismo fiscalizador, encontrando en sus nóminas pagos a trabajadores comisionados a centros laborales con funciones distintas a los objetivos de ese programa, señaló el informe de resultados.
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El documento indica que en 2022, último año de la administración de Francisco García Cabeza de Vaca, la Secretaría de Hacienda envió recursos por 3 mil 696 millones 004 mil pesos, para ser ejercidos en el Fassa, de los cuales la Auditoría Superior revisó una muestra por $3 mil 485 millones 890, que representó el 94%.
Al final del análisis “se determinaron 2 millones 384 mil 300 pesos pendientes por aclarar y que se integran por $1 millón 766 mil por realizar pagos a diez trabajadores con licencia y goce de sueldo comisionados a centros de labores con funciones distintas a los objetivos del Fassa y de los cuales no se presentó la solicitud oficial con la justificación correspondiente, ni se comprobó que los servicios que motivaron la comisión no fueron remunerados”.
Por lo tanto, “no se acreditó que dicho personal devengó los sueldos pagados”, dictaminó la Auditoría Superior de la Federación, que además señaló el uso de 618 mil pesos como pago a dos trabajadores que no contaban con el perfil requerido para el desempeño de los puestos por los que fueron contratados.
“Se infringió la normativa, principalmente en materia de transferencia de recursos, servicios personales, así como de la Ley de Coordinación Fiscal, Ley General de Contabilidad Gubernamental, Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas, Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y diversos reglamentos, lo que generó un probable daño a la hacienda pública federal por un importe de 2 millones 384 mil 300 pesos”, expuso la ASF.
Al examinar toda esa cuenta pública, la ASF emitió 30 resultados, de los cuales, en 15 no se detectaron irregularidades y 12 fueron solventados por la entidad fiscalizada antes de la presentación de su informe final. Los tres restantes generaron una promoción de responsabilidad administrativa sancionatoria y dos pliegos de observaciones.
Cabe aclarar que, en total, se determinó esclarecer un monto por 3 millones 948 mil 801 pesos, de los que en el transcurso de la auditoría se recuperaron $1 millón 564 mil 458 con motivo de la intervención de la ASF; $51 mil 620 se generaron por cargas financieras y $2 millones 384 mil 343 están pendientes de aclaración.
SJHN