El Instituto de Política Laboral consideró necesario aplazar la reforma legislativa para regular el outsourcing y así buscar mejores acuerdos entre el gobierno y la Iniciativa Privada.
Esta asociación presidida por el ex magistrado del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, Rubén López-Malo Lorenzana, dijo que dar más tiempo a las modificaciones en la subcontratación sería un paso positivo si las negociaciones logran evitar la criminalización y persecución de las empresas, así como la disminución de las cargas fiscales que afectarían a cientos de pequeñas y medianas empresas que operan con estos sistemas.
López-Malo comentó que el riesgo de discutir y dictaminar la iniciativa presidencial en el actual periodo de sesiones de la Cámara de Diputados, es generar una legislación con muchos huecos y fallos debido a que la reforma propuesta descobija a sectores productivos como el automotriz, construcción, tecnología o los servicios, los cuales subsisten mediante el trabajo especializado que ofrecen en la cadena productiva.
Además, señaló que en las negociaciones para la reforma de la subcontratación es necesario hacer a un lados banderas ideológica y entender la dinámica del sistema laboral, pues “en la actualidad la subcontratación de servicios es una práctica mundial avalada por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), siempre y cuando se respeten los derechos de los trabajadores organismo que está integrado por un grupo de especialistas en materia laboral”.
Agregó que el mejor escenario para la discusión legislativa de la iniciativa presidencial es que pase al próximo periodo legislativo y se madure el proyecto con propuestas que surjan del diálogo social realizado entre empresarios, trabajadores, sindicatos y autoridades gubernamentales.
JLMR