Los aspirantes a consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), Jesús Baena Saucedo y Javier Aparicio, señalaron que durante este proceso se debe evaluar sin prejuicios y en las mismas condiciones.
Además, Aparicio apuntó que no se trata de un asunto en el que el gobierno decida “con buenos o malos ojos”, sino de un ejercicio en el cual se tiene que evaluar la trayectoria y compromiso democrático, así como de su imparcialidad con el gobierno.
En entrevista con MILENIO Televisión, Aparicio —quien es profesor e investigador del CIDE— señaló que se espera dentro de el Consejo General del INE, la integración de uno que actué bajo imparcialidad, refiriéndose a su vez como un crítico de este y otros gobiernos.
“Yo he sido crítico de este gobierno, pero también del gobierno de Peña Nieto y del gobierno de Calderón, ahí está la evidencia de mis opiniones y mis trabajos de investigación (...) yo sé de lo que se trata actuar con imparcialidad, es un asunto de poner al margen la opinión que uno tenga sobre el gobierno, sobre la ley las preferencias propias que uno tenga al margen y organizar elecciones confiables en el marco de la Constitución y las leyes aplicables”, declaró.
De manera paralela, el también aspirante a consejero y magistrado del Tribunal de Aguascalientes, Jesús Baena Saucedo, consideró como un avance la garantía que sea una mujer quien encabece al órgano electoral, reconociendo así la sentencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral, pero apuntando que también debe incluirse a grupos vulnerables, por lo instóque se debe “involucrar a nuestra población en los ejercicios de nuestro derechos político electorales, particularmente el de formar parte de autoridades electorales”.
Al preguntarle a ambos respecto al reto de una reforma electoral en el proceso de 2024, reconocieron que una posible modificación sería sustancial, el cual se convertiría “el complejo y más grande de la historia”, para Baena, apuntando, que “nos va a generar bastante incertidumbre: incluso la reforma trae sesgos que son contrarios en la Constitución. Esto es delicado, no es bien visto desde el punto de vista de la estabilidad democrática”.
Aparicio sostuvo que el órgano electoral se enfrenta a “un reto creciente (de) organizar elecciones libres y justas”.
JLMR