Sin una ceremonia de inauguración, el 10 de febrero de 2016, se realizó el primer vuelo oficial de la aeronave conocida como TP01, donde fue una de las dos ocasiones en que ciudadanos viajaron a bordo del avión presidencial “José María Morelos y Pavón”.
Los invitados de honor fueron 10 niños de distintos estados del país, quienes obtuvieron los mejores promedios escolares y por ello, pudieron viajar junto con el ex presidente Enrique Peña Nieto.
Uno de los menores le regaló un dibujo del nuevo avión y otra niña un rosario así como un monedero para su entonces esposa Angélica Rivera.
Se eligió la conmemoración del 101 Aniversario de la Fuerza Aérea Mexicana para estrenar el avión, donde el entonces presidente Enrique Peña Nieto realizó una gira a Hermosillo, Sonora.
Como parte del primer vuelo, y minutos antes de aterrizar, cuatro aviones F5 de la Fuerza Aérea Mexicana acompañaron al TP01 “José María Morelos y Pavón”.
Tras realizar los protocolos de seguridad, los menores y funcionarios subieron a la aeronave, que, sustituyó al Boeing 757 “Presidente Benito Juárez”, el cual fue adquirido en el sexenio de Miguel de la Madrid y sirvió en las administraciones de Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y durante la mitad del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto. Se retiró en 2016, siendo el avión presidencial con más tiempo de servicio.
Alrededor de las 11:40 de la mañana, se abrió una puerta corrediza que dividía el área donde viajaba el Ejecutivo con su gabinete y la zona designada para el Estado Mayor Presidencial, tripulación y medios de comunicación.
En entrevista, el entonces primer mandatario dijo que “no es propiedad del Presidente, sino que lo utiliza para cumplir con sus tareas (...) A todos les damos el remojo”.
Peña Nieto afirmó que “este (avión) no es un regalo”, y después se permitió hacer un recorrido a los medios de comunicación de la fuente presidencial.
Ese día viajaron en el TP01 los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; de la Defensa, General, Salvador Cienfuegos; de la Marina, Vidal Francisco Soberón y de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.
El avión se divide en tres áreas: la primera ubicada en la parte delantera, era para el Estado Mayor Presidencial, la segunda – en medio- para el Ejecutivo y la comitiva; y en la tercera (parte trasera del avión) viajaba parte del Estado Mayor Presidencial, tripulación y medios de comunicación.
También contaba con una recámara donde cabe una cama King Size y un baño con regadera. En ese momento tenía una pequeña caminadora. Los acabados eran en madera y tapiz.
Este espacio es similar al avión presidente Juárez. Como es costumbre el asiento del Ejecutivo tenía una funda en color verde y el escudo nacional.
Desde su llegada a México, el nuevo avión presidencial realizó distintos vuelos de prueba por territorio nacional, en su mayoría de ida y vuelta a la Ciudad de México.
La aeronave se adquirió en el sexenio del ex presidente Felipe Calderón y de acuerdo con un estudio no era viable su venta.
Yucatecas también viajaron en el TP01
El 15 de marzo de 2016, a invitación del entonces presidente Enrique Peña Nieto, Fátima Chay Chi, de Yucatán, y su amiga Laigxa Canul, viajaron a la Ciudad de México a bordo del avión presidencial “José María Morelos y Pavón”. El deseo de la joven era conocer la capital del país y la Residencia Oficial de Los Pinos.
Durante un evento de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y la Fundación Patrimonio Indígena, que presidió el cantante Miguel Bosé, donde firmaron un convenio de concertación para el apoyo a niños y jóvenes indígenas del país, Fátima le expresó su intención de estudiar Ingeniería Civil y su aspiración de ser algún día presidenta Municipal de Maxcanú, gobernadora de Yucatán y presidenta de la república.
Al finalizar el evento, Peña Nieto invitó a Fátima a viajar con él de regreso a la Ciudad de México, primero lo hicieron en helicóptero y después en el TP01.
jlmr