El avión presidencial, adquirido durante el periodo del ex presidente Felipe Calderón, que fue entregado y utilizado en el periodo del ex presidente Peña Nieto y que, hasta el día de hoy, no ha logrado ser vendido, rentado o rifado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, realizó un vuelo de dos horas y 43 minutos hacia la península de Yucatán, donde a la altura de Mérida retrocedió a la Ciudad de México.
El último vuelo del que se tiene registro fue el 16 de julio, cuando regresó de Tokio, con escala en Alaska, tras llevar equipo para los atletas que participaron en los Juegos Olímpicos.
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El vuelo de ayer coincidió con la reciente contratación de una empresa llamada Global Jet, con sede en Mónaco, que a partir del lunes promociona la venta del avión.
La Oficina de la ONU para Servicios y Proyectos, a la que el gobierno de López Obrador recurrió de nuevo para lograr la venta del avión, pagará poco más de medio millón de pesos para que Global Jet promocione el avión por 16 semanas, con una posible prórroga a 32.
En su página de internet, la empresa ya exhibe fotos de los interiores de lujo, con los escudos de la Presidencia, una regadera, caminadora, oficina y los asientos de los pasajeros. Asimismo, Global Jet Mónaco incluye en su página un apartado para realizar ofertas de compra.
En 2020, MILENIO reveló que el primer intento para vender el avión presidencial con ayuda de la ONU terminó sin éxito. Fue en 2019 cuando se intentó adjudicar por esa vía, hubo más de 40 interesados, pero solo uno fue recomendado para continuar con las negociaciones con el gobierno mexicano, pero la venta no se concretó.
LP