Este 10 de marzo se cumplirá un año de la entrevista que hice para Telediario al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas a propósito de la publicación de su libro Por una democracia progresista (Debate, 2022).
Visto lo que sucedió recientemente entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y el ingeniero Cárdenas, todo parece indicar que “ya se traían ganas”, o al menos el Presidente ya sabía que el ingeniero tenía reuniones con los conservadores representantes de la “oligarquía” del llamado Colectivo por México.
“Lo estimo mucho –a Cuauhtémoc Cárdenas–, lo respeto y lo considero precursor de este movimiento, pero estamos viviendo un momento de definiciones y esta ancheta está muy angosta, no hay para dónde hacerse. Es estar con el pueblo o con la oligarquía, no hay más, no hay justo medio”, dijo el mandatario federal.
Esto es lo que me dijo el ingeniero Cárdenas en su entrevista de hace un año:
Debatir el presente para un mejor futuro, dice usted en su libro Por una democracia progresista, ¿es posible debatir con la polarización que vivimos?
Yo creo que es necesario, hay que insistir, hay que buscarlo, todo aquél que pueda y quiera, que entre a debatir cómo está la situación actual; que revisemos con diferentes visiones cómo están los distintos problemas que enfrenta el país, y que tratemos de encontrar las mejores soluciones.
¿Cuáles son los problemas prioritarios a enfrentar y resolver?
Se tienen que enfrentar y resolver a partir de aplicar las medidas adecuadas. Yo creo que los que vivimos todos, todos los días, la inseguridad que campea en todo el país, por el crimen organizado, el rezago económico, una economía que no crece con suficiencia, la carencia de inversión tanto pública como privada, una mejor educación, una mejor salud. Me parece que sí, lo que se ha venido haciendo en los últimos años no está dando los resultados que se desean.
El presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una visión y atribuye todo al periodo neoliberal, ¿qué tanto de verdad hay en esto?
Yo creo que este Gobierno hereda una situación sumamente conflictiva para todo el país. Esto es el rezago económico, la presencia del crimen organizado, en muchas actividades; la pobreza que ha crecido, el desempleo que ha crecido. Ahora me parece que hace falta –insisto-, me parece, el revisar qué se tiene que hacer para superar los problemas, porque lo que se ha venido haciendo en estos tres años no ha sido suficiente para superar estos problemas.
¿Pero ve usted que haya voluntad de hacerlo? Vemos y escuchamos todos los días confrontaciones del actual Gobierno con todos los sectores.
Yo lo que veo es que hay mucha gente de distintos sectores, diversas visiones políticas, diversas posiciones económicas, con el deseo de que se resuelvan los problemas y que el país entre en una situación diferente. Habrá que convencer a los que todavía piensen que están haciendo bien las cosas.
¿Ustedes no han hablado? Usted y el Presidente fueron compañeros de viaje.
Ya hace rato que no, somos amigos, hemos coincidido en muchos momentos en la actividad política.
¿Cómo es?
Yo creo que es un hombre que está convencido del combate a la corrupción, que está convencido de una honradez, desde luego de una honradez que se encuentra a prueba de todo.
¿Él? Porque en su entorno hay muchas personas que…
Puede ser. Yo no siento que él esté comprometido con ningún acto indebido.
En materia de seguridad pública, todo lo que ha ocurrido, masacres un día sí, y otro también…
Por eso me parece indispensable revisar cómo se ha venido combatiendo la delincuencia, y si no está dando resultados, tenemos que buscar otros caminos. Me parece que en este caso está la necesaria desmilitarización del combate a la delincuencia, esto es que no sean cuerpos militares, sino cuerpos civiles, donde haya además una buena coordinación con los distintos sectores de la sociedad.