"Arrepiéntete y cree en el Evangelio", esa es la oración con la que sumada a la oposición de la ceniza, los católicos de México y del mundo inician la cuaresma, época de preparación de cara a la Semana Mayor.
En entrevista para MILENIO, el párroco titular de la iglesia de Nuestra Señora de Aparecida, en la alcaldía Venustiano Carranza, Arturo Barranco aseguró que durante los 40 días previos a la Semana Santa, "la familia sigue siendo el medio, el ámbito más importante por el cual Dios nos va a permitir seguir creciendo".
Para que los vendedores de los mercados de la Arquidiócesis Primada de México pudieran realizar el rito de inicio de la cuaresma, sacerdotes y seminaristas acudieron a esos lugares de trabajo para poder imponer la ceniza.
Para enfermos y las personas resguardadas en sus hogares, los clérigos se las ingeniaron para que los católicos se llevaran ceniza a sus domicilios.
"Estos sobrecitos tienen lo que son ceniza esto para cuando un familiar no pueda venir o algún enfermo, ustedes mismos como laicos pueden poner la ceniza", explicó el seminarista Carlos Alexis.
Los cuarenta días antes de la Pasión de Cristo es una época ideal, según los católicos, para reencontrarse con Dios y su fe. Para los adultos mayores, que después de dos años pudieron asistir a misa, fue un gran logro.
Es el caso de Margarita y Casimira de la Torre, dos adultas mayores quienes con cubrebocas y acompañadas de su enfermera agradecieron que "Dios nos dio licencia de salir y venir a misa".
Para María Elena López, es buena señal que la iglesia luciera abarrotada. "Ahora sí había gente, que ya están saliendo sin miedo, verdad, esto, se va a quedar la pandemia pero tenemos que hacer nuestra vida, para que están encerrados, tan bonita la vida".
JLMR