La Comisión Nacional de Derechos Humanos pido cesar las descalificaciones hacia periodistas y comunicadores alentadas desde diversos sectores del gobierno por considerar que fomentan la división y agudizan la situación crítica de violencia contra la prensa en el país.
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En un comunicado de prensa, la CNDH pidió “evitar, disuadir y rechazar cualquier tipo de discurso amenazante contra comunicadores y medios”.
El organismo detalló que el servicio público es una vocación y no una plataforma para denostar o descalificar a la prensa que no coincide con una postura, ideología o decisión de gobierno.
“Los recientes insultos y descalificaciones de servidores públicos, contra comunicadores en redes sociales ocurrieron de manera previa a diversos ataques en esas plataformas digitales contra periodistas e incluso uno de ellos recibió una amenaza anónima en su domicilio, por lo cual no debe pasar inadvertido que tales agresiones se dan en el contexto del discurso amenazante de funcionarios que fomenta ambientes poco propicios para el ejercicio del periodismo e incrementa el riesgo de quienes lo ejercen”, informó.
La CNDH dijo que México es un país peligroso para quienes ejercen el periodismo y que en los últimos meses se incrementaron las descalificaciones hacia medios de comunicación y periodistas, principalmente de funcionarios del Estado.
De acuerdo con la CNDH, la discusión pública es parte importante de la vida en democracia y, aunque en algunas ocasiones los debates y la crítica pueden ser incómodos, no debe derivar hacia las descalificaciones, estigmatizaciones o insultos hacia comunicadores y medios.
En la última semana los periodistas, Guillermo Sheridan, Héctor de Mauleón y Carlos Jiménez denunciaron amenazas.
OVM