Habitantes de Tula marcharon el sábado para demandar soluciones ante la contingencia que vive el municipio tras el desbordamiento del río Tula el pasado 7 de septiembre, lo cual devastó muchas zonas y causó al menos 17 muertes.
Los manifestantes, quien forman parte de la "Gran asamblea de damnificados Tula 2021", culminaron la marcha con un mitin en el teatro al aire libre, desde donde señalaron que se requiere unidad entre los afectados para que puedan presentar de manera coordinada las peticiones y propuestas ante las autoridades y con ello mejorar los resultados de las gestiones.
Indicaron que los afectados enfrentan diversas necesidades, algunas de mayor urgencia, y por ello destacaron que debe existir coordinación entre los damnificados para hacer frente a la situación y exigir a las autoridades los apoyos correspondientes.
Por el momento, se requiere limpieza en los comercios y viviendas, así como apoyos con enseres, electrodomésticos, y en el caso de los negocios, créditos para poner nuevamente en operación los comercios y de esta manera reactivar la actividad comercial de la zona centro.
Consideraron que es fundamental reactivar la economía en el municipio, pues hay más de mil comercios con pérdidas totales, luego de que el agua residual del río Tula, la cual procede en gran parte del Valle de México y su zona metropolitana, subiera más de dos metros en algunos puntos, dañando la mercancía de las pertenencias y las propiedades de los residentes de varias zonas.
Sobre el tema de las descargas, algunos damnificados manifestaron su oposición al Túnel Emisor Oriente y el Emisor Central, y pidieron a las autoridades que el Valle del Mezquital ya no sea la "letrina" del Valle de México y la zona metropolitana.
Entre los primeros acuerdos de la Gran asamblea, que ha sesionado en los últimos días, y en la que participan representantes de calles y colonias afectadas, fue el solicitar que los apoyos sin intermediarios y malas prácticas, así como la celebración de foros con participación de especialistas para poner soluciones definitivas a la problemática de inundaciones por descargas residuales del Valle de México.
El tercero de los acuerdos fue solicitar a los tres niveles de gobierno que informen cómo se va a dar el retorno de los damnificados a sus viviendas y los comerciantes a sus establecimientos, y sobre todo, qué pasara a corto plazo con las aguas del río Tula, además de procurar que las autoridades asuman sus responsabilidades con los damnificados, de acuerdo a sus cargos y facultades.
Los miembros de la gran asamblea invitaron a más ciudadanos a sumarse al movimiento para unificar las demandas y generar acuerdos conjuntos para agilizar la respuesta de las autoridades ante los miles de afectados por el reciente siniestro.
Urgieron al gobierno municipal el restablecimiento de los servicios básicos en las zonas afectadas, para apoyar la reactivación de las áreas lo más pronto posible.