Integrantes de la comunidad científica nacional celebraron el anuncio de transformar el Conahcyt en la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti), con la investigadora Rosaura Ruiz al frente.
Esta mañana, la próxima presidenta Claudia Sheinbaum, anunció a la bióloga Ruiz como titular de la dependencia que se conformará durante su gobierno.
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Enrique Cabrero, exdirector general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, observó el anunció como una estrategia de restablecimiento del diálogo con la comunidad científica, el cual, dijo, durante este sexenio se deterioró.
“Esperamos que la política pública científica sea una prioridad de este gobierno, venimos de una situación muy difícil para toda la comunidad científica y este es un mensaje de reposicionamiento de la política de ciencia y tecnología, es un mensaje de que será una prioridad para este gobierno, y yo diría que es un mensaje hasta de reconciliación con la comunidad científica”, señaló.
Cabrero confió en que se impulsará el diálogo con la comunidad científica, sobre todo, que se restablezca el intercambio de ideas con una red de miembros científicos no gubernamentales que participen en la deliberación.
El también exdirector del CIDE destacó el perfil de Rosaura Ruiz como una persona dispuesta al diálogo y a la escucha.
“Creo que Rosaura es alguien conoce bien al sector, más allá de su trayectoria académica , ha estado en diferentes foros, nos hemos encontrado mucho en el debate y siempre ha contribuido con ideas y creo que es algo muy comprometido con el sector. Brinda confianza y esperaremos la propuesta cómo se va a cristalizar esa secretaría, y no quede en algo simbólico”, añadió.
El biomédico David Romero, manifestó su tranquilidad porque consideró que la creación de una secretaría de Ciencia es un buen augurio para dotar de suficiente relevancia el sector.
“Estaba preocupado un poco con el discurso de continuar con lo existente que para mí no ha sido lo que ocurrido en ciencia en el último sexenio. Sí veo con buenos ojos que se genera una secretaría de ciencia y tecnología lo cual revela que están atentos a lo que la propia comunidad ha solicitado”, señaló.
El investigador integrante de la red ProCiencia MX, señaló que por lo menos desde 2009 había sido una solicitud de la comunidad científica la creación de una secretaría con estas características.
“Es positivo que haya habido la sensibilidad para elevar al rango de secretaría y desde luego, es un indicio de que para este gobierno, la ciencia va a ser importante”, dijo.
Romero señaló que la comunidad científica deberá ser partícipe en la construcción de la nueva dependencia y poner lupa en los objetivos y su funcionamiento.
“Primero definición de objetivos, hacia dónde se quiere llegar, cuál es el alcance que se le pretende dar y con qué presupuesto va a funcionar. Tiene que reformarse la ley de administración pública federal para acomodar esta nueva secretaría y, claramente, la Ley general de humanidades, ciencia y tecnología, de aprobación tan atropellada el año pasado tiene que modificarse”, compartió.
Asimismo, Romero coincidió en el perfil conciliador de Ruiz, algo que en el presente sexenio no existió.
“La doctora Ruiz es una académica reconocida con experiencia directiva dentro de la UNAM y fuera de ella, como presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias. Sus características personas son bastante más afables y más de escucha, en todos esos sentidos se diferencia de la Dra. Álvarez Buylla, quien adolecía de esas virtudes”, señaló.