Pese a que la contaminación del aire es un problema que azota a Nuevo León desde hace años, en el actual 2024 únicamente se ha emitido una alerta ambiental en la entidad.
Fue el 12 de enero cuando la Secretaría de Medio Ambiente publicó a través de sus redes sociales que se activaba la alerta debido a tolvaneras en la Zona Metropolitana de Monterrey.
En el comunicado, la dependencia explicó que los fuertes vientos, aunados a la baja humedad, provocaron la suspensión de polvo.
Finalmente, cuatro días después, el 16 de enero, desactivaron la contingencia.
Una situación sin precedentes se registró el 31 de enero, cuando la dependencia estatal activó una alerta ambiental, pero exclusivamente para Cadereyta, al argumentar que se debió a las emisiones generadas por la refinería, pero la desactivó al día siguiente.
Lo mismo sucedió el 26 de febrero, cuando la contingencia fue solo para el municipio de San Pedro, derivado de la alta concentración de partículas menores a 10 micrómetros, sin embargo, dicha alerta nunca fue desactivada por la Secretaría.
Después, el 27 de marzo se alertó por fuertes vientos y tolvaneras en la Zona Metropolitana, donde se esperaban rachas de 50 a 70 kilómetros por hora, y se desactivó hasta el 30 de marzo.
Desde entonces, aunque se han registrado días muy contaminados en la metrópoli, no se ha emitido ninguna alerta.
Ejemplo de ello es el 2 de abril, cuando había cuatro estaciones con extremadamente mala calidad del aire, ocho con muy mala, dos con mala y solo una registrando buena calidad del aire.
También el 10 de abril se registraron cuatro estaciones en morado, color que representa extremadamente mala calidad, dos con muy mala, ocho en mala calidad, una en regular y ninguna en color verde.
nrm