Ante la inminente llegada de rachas de viento de 40 a 60 kilómetros por hora, el sistema estatal de Protección Civil ha lanzado una serie de recomendaciones para hacer frente a la posible formación de tornados no-supercelda.
Cabe recordar que hace diez años, en agosto del 2014, el municipio de Almoloya registró un tornado no-supercelda, el cual dejó importantes daños a su pasó. Ante ello, se insta a la población estar alerta ante los pronósticos del clima en sus regiones.
Entre las recomendaciones que emitieron, destacaron que lo principal es mantener a la población alerta y preparada para actuar de manera adecuada en caso de una emergencia climática.
Recomendaciones ante tornados no-supercelda
- Buscar refugio en lugares seguros, como el sótano o una habitación interna sin ventanas, preferiblemente en el piso más bajo de la vivienda.
- En ausencia de un sótano, resguardarse en espacios interiores como el baño, un clóset o un pasillo central.
- Buscar protección debajo de objetos resistentes, como una mesa pesada, para minimizar el riesgo de lesiones.
- Mantener la calma durante el fenómeno y permanecer en un lugar seguro una vez que haya pasado.
- Verificar la presencia de heridos entre las personas cercanas y, de ser necesario, brindar primeros auxilios o buscar ayuda médica.
- Al salir después del evento, extremar precauciones ante la posible presencia de postes de electricidad caídos u otros peligros.
¿Qué son los tornados no-supercelda?
Los tornados no-supercelda son columnas de aire que se forman en contacto con la tierra y una nube, caracterizados por su alta velocidad angular. Aunque más delgados y de menor duración e intensidad que los tornados normales, representan un riesgo significativo y pueden causar daños severos, incluso en zonas rurales.