Cuando una mujer camina por la calle y de repente se encuentra a una o más personas sospechosas, es un factor de riesgo, una alerta y se interpreta como código amarillo; hay que tomar una alternativa para evitar el peligro, para que sepan actuar en una situación de violencia, explicó Arturo “El Toluco” Contreras, entrenador en el gimnasio “Almas Bravas”.
“El Toluco” tiene más de 40 años de experiencia en los deportes de contacto y esto lo motiva a compartir sus conocimientos; en este caso, se enfoca en capacitar a las mujeres que viven en Toluca, Estado de México, uno de los municipios con altos índices de violencia contras las mujeres en la entidad.
El gimnasio se ubicada cerca del Mercado Juárez, en el centro de la ciudad, y Arturo Contreras les enseña a entender los códigos, los cuales permiten distinguir las diferentes situaciones de riesgo y las medidas de prevención y acción, en caso de ser necesario.
“Puede venir cualquier mujer, ‘Almas Bravas’ les abre las puertas de este gimnasio para que vengan, para que se empoderen, para que aprendan, para que sepan tener ese contacto y no tengan esa situación de violencia en la calle”.
Para poder actuar en estos casos, la mujer debe entender todos los factores de riesgo, es por ello que en este lugar les explican las bases; como dice “El Toluco”, primero se les enseña a caminar, ya que es imposible aprender técnicas de defensa personal si no se conocen las bases.
Señaló que los cursos de defensa personal abundan en todos lados; sin embargo, pocos están capacitados para entrenar en casos de situaciones reales de riesgo; por lo regular se enseña en escenarios fantásticos e irreales, que incluso pueden poner en riesgo la vida de las alumnas.
“Hay muchos pseudo profesores que toman un curso de un fin de semana y les están dando clases de defensa personal enfocados a situaciones que no son reales; son deportes de contacto”.
Por ello, resaltó, las víctimas deben aprender a actuar por medio de los códigos de alerta, pues en los primeros pueden ayudar a evitar un riesgo mayor; por ejemplo, en el código amarillo, la mujer detecta un probable riesgo que debe evitarse desde cambiar el sentido en el que camina, tomar un teléfono y pedir ayuda o simular que está hablando, para que él o los probables agresores se sientan intimidados a ser reconocidos y denunciados. “Son situaciones ilógicas que en la calle a las mujeres las tratan diferente, las acciones son diferentes; estos entrenamientos son enfocados a la realidad”.
Indicó que esas son las bases para iniciar el aprendizaje, ya que no se trata de pegar o defenderse cuerpo a cuerpo en el primer momento. Por ello, en este gimnasio aceptan niñas desde los 7 años en adelante donde también les enseñan a hacer cardio o a usar algunos tipos de armas. “Están trabajando un poco de cardio; pero vamos a estar enfocados a una nueva técnica que se llama tanto… esto es un arma en las manos correctas”.
El gimnasio está abierto desde las 07:00 hasta las 20:00 horas toda la semana; sin embargo, lunes, miércoles y viernes, son días exclusivos para las clases a mujeres, para que aprendan a actuar y defenderse en calle.
Clases que cambiaron su vida
Laura Martínez Agallo es una joven de 30 años que vive en el municipio de Zinacantepec y que desde niña ha visto de cerca la violencia, misma que si no se detiene desde el núcleo familiar, afecta social y psicológicamente; por ello, desde hace tiempo, aprendió defensa personal, algo que lleva y llevará el resto de su vida para enfrentar cualquier adversidad.
“Sufrí maltrato desde el núcleo familiar por parte de mis hermanos mayores, era la única mujer. Mi idea siempre fue aprender a defenderme de los demás, ya que veía el abuso que causaban mis compañeros a mis compañeras y también quería defenderlas”.
En tres ocasiones ha estado cerca de ser víctima de un asalto, violación o secuestro; sin embargo, estar alerta y reaccionar en el momento le ayudaron a que nada pasara a mayores, pero en cada uno de esos casos nunca encontró ayuda de otra persona. "Aprender a respirar me sirvió mucho para sentirme más fuerte, con autoestima y caminar sin temor; analizar mi alrededor y confiar o desconfiar de las personas".
Ahora, cuando tiene la oportunidad, dijo, también enseña a otras mujeres a defenderse con técnicas que ella aprendió y que le han ayudado a enfrentar algunas situaciones de peligro.
Violencia en Edomex
Según el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), de enero a junio de 2021, se registraron 66 feminicidios en el Estado de México, 110 fueron víctimas de homicidio doloso y 120 de culposo; por municipio, Chicoloapan, Ecatepec, Tultitlán, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, Texcoco y Toluca se encuentran entre las 50 demarcaciones con más casos de feminicidios en México.
En dicho periodo, 9 mil 103 mujeres fueron víctimas de lesiones dolosas y mil 634 de culposas; 13 fueron víctimas de secuestro y 498 de extorsión.
MMCF