Ya viven crisis de agua en siete ejidos de Altamira y todavía esperan lo peor

La laguna de Champayán tiene un marcado descenso en su nivel por lo que sus habitantes temen quedar incomunicados

Laguna de Chamapayán sufre descensos de agua por falta de lluvias (Fotos: Yazmin Sánchez)
Reynaldo Gutiérrez
Altamira /

La laguna de Champayán en el municipio de Altamira, es un caudal que cada día va desapareciendo y los habitantes de siete comunidades ejidales temen quedar incomunicados y sin el vital líquido.

La falta de lluvias ha provocado un marcado descenso en dicho cuerpo de agua, siendo las lanchas el principal medio de transporte, cuyos motores se atoran con el lodo del fondo.

Mediante un recorrido que realizó Milenio Tamaulipas, se logró constatar las dificultades por las que están atravesando quienes habitan en los ejidos Cruz Grande, Martín A. Martínez, Cues Norteños, Torno Largo, Palmas Altas y Vuelta de las Yeguas, pertenecientes al sur de la entidad tamaulipeca, además de las familias que residen en Mayorazgo Bajo, vecinos del Norte de Veracruz.

Laguna del Champayán. (Fotografía: Yazmin Sánchez)

Los pobladores esperan lo peor, pues aún faltan los dos meses más críticos del periodo de estiaje en el presente año, lo cual podría complicar sus actividades para poder subsistir.

Se dedican a la agricultura, pesca y ganadería, pero señalan que cada día se les dificulta el poder trasladar sus mercancías en lancha hacia la cabecera municipal de Altamira, como es el caso del quedarse incomunicados.

“Es muy bajo el nivel de las lagunas, el río está bajo pero ahí sí se puede transitar, pero para ir a vender el producto al muelle de Altamira es un problema grandísimoincluso mi suegra anoche llevó tomate y se quedaron varados, duraron casi dos horas para sacar la lancha, es mucho muy difícil”, comentó Noelia Díaz Hernández, habitante del ejido Cruz Grande.

A la población de estos ejidos no les queda más que esperar a que las autoridades reaccionen, pues la situación económica ha sido muy difícil y al secarse los vasos lacustres sería lo peor que les podría suceder.

Y así continuamos con el recorrido sobre la laguna de Champayán y desembocamos en el Río Tamesí, donde del lado izquierdo forma parte del estado de Veracruz del lado derecho es Tamaulipas.

En un brazo de dichos afluentes se observa el panorama desolador, donde las fugas del dique El Camalote están cobrando factura.


"Ahora, las tapadas que hacen en el Camalote con costaleras no sirven, hagan un proyecto bueno, algo que funcione, porque esas tapadas la misma gente las quita en tiempo de acamaya, quitan los costales para poder pescar y sigue el problema, que lo hagan de concreto y verán que no pasa nada, le hacen mucho al tonto, mejor que le inviertan”, dijo Ricardo Demes Jasso, habitante del ejido Martín A. Martínez.

“Aquí una embarcación cargada con tomate se hace de perdido una hora cuarenta minutos para llegar al muelle de Altamira, si viene de otros ejidos más retirados se tardan hasta dos horas y media debido al bajo nivel de agua, nos acabarnos más rápido los motores, porque mire, no se puede transitar”, dijo.

En tanto, los pescadores que viven de esta actividad en el municipio de Altamira, solo han recibido promesas de apoyo y no les ha llegado ningún recurso para enfrentar los periodos de estiaje.

SJHN

LAS MÁS VISTAS