Los alumnos de la escuela primaria Jesús González Ortega no han retomado sus clases presenciales desde hace nueve meses, fecha en la que fueron captados tomando clase con casco para protegerse de los pedazos de techo que caían de los salones de clase.
La algarabía qué hacían los escolares todas las mañanas se perdió, pues en aquel entonces la directiva del plantel anunció que se mantendrían las clases en línea, mientras se realizaban los trabajos de restauración.
Sin embargo con el pasar del tiempo y el cierre del ciclo escolar, parece que no será pronto cuando los estudiantes tengan la oportunidad de regresar a las aulas de manera normal.
Ubicada en el fraccionamiento Bernardo Reyes en Monterrey, la institución fue noticia luego de que el pasado mes de septiembre 2022 el techo de algunos salones comenzó a desprenderse, y a consideración de los padres en afán de la educación de sus hijos, estos acordaron enviarlos con cascos y no suspender las clases.
La imagen de los pequeños de quinto grado dio la vuelta al mundo y activó los mecanismos de las autoridades educativas para arreglar el problema.
En principio se informó que se iba a resanar el techo pero el daño estructural era mayor y hubo que hacer una reparación más grande, la cual 9 meses después no ha sido terminada.
Vecinos de lugar confirmaron que hace varios meses no ven niños ni en la hora de entrada ni de salida, pero dijeron ignorar los motivos.
La falta de clases presenciales fue confirmada por madres de familia de la escuela primaria, quiénes aseguraron que se ha cumplido con el calendario escolar a través de las clases en línea, y que los maestros han estado trabajando pese a que los alumnos estudian desde sus casas.
Además afirmaron qué se está trabajando en la reparación de todas las estructuras del edificio, y por eso los trabajos se alargaron todo el año escolar, pero esperan regresar a clases presenciales en agosto próximo.
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