La mañana de este 25 de diciembre la ciudad de León se asemejaba a una ciudad fantasma, pues la cantidad de automóviles y peatones que recurrentemente se pueden observar por sus calles no estaban presentes.
Milenio realizó un recorrido por distintos puntos a lo largo y ancho de León desde tempranas horas de este día de Navidad, donde fue sencillo percatarse que se podían contar con los dedos de las manos cuántos autos circulaban.
Incluso hasta el medio día bulevares como Timoteo Lozano, Francisco Villa, Vicente Valtierra, Campestre, Juan Alonso de Torres, Paseo de Jerez y Juan José Torres Landa tenían casi nula actividad.
Sobre estas vías los locales comerciales se hallaban cerrados, por lo que solo algunas personas saliendo de sus hogares transitaban caminando por algunas calles.
Tanto Navidad como Año Nuevo son celebraciones realizadas en días de asueto donde una gran mayoría de los ciudadanos no tienen que ir a trabajar tras las fiestas que finalizan hasta altas horas de la madrugada.