La red de consciencia ambiental Queremos Vivir tampoco permitirá el revestimiento del río Tula, pues el ecosistema de esta canal se debe preservar y para ello hay alternativas que permitirían evitar inundaciones y conservar el río, pero fueron ignoradas por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), expresó Angélica Arellano Ángeles, secretaría general de dicha organización.
Dijo que al igual que la Gran Asamblea de Damnificados también se movilizarán en contra de las obras de revestimiento contempladas en una de las fases del plan hídrico de emergencia para Tula, pues señaló que al colocar concreto en el lecho del río lo estarían convirtiendo en un gran canal que cruza “serpenteando” una zona urbana.
Acusó que las autoridades de los tres niveles son responsables de los riesgos generados por las construcciones sobre la ribera del río pues son las que otorgan los permisos, por lo que no puede responsabilizarse a otros por esta problemática que incrementa considerablemente el riesgo de afectaciones a la población.
Arellano afirmó que todas las agrupaciones deben sumarse para realizar movilizaciones masivas en las que expresen su inconformidad al proyecto en los términos planteados por la Conagua, pues reiteró que se trata del mismo proyecto de 2017, pero dosificado para que de esta manera se revistan gradualmente con cemento partes el río y se convierta en un gran canal para recibir más agua del Valle de México, aun cuando esa región debe responsabilizarse de sus desechos y habilitar vasos reguladores y tratar el agua en lugar de enviar toda la descarga al Valle del Mezquital.
Adelantó que recurrirán a las acciones necesarias para demostrar su inconformidad por el desinterés del gobierno para tomar en cuenta la opinión de los especialistas externos e internacionales que presentaron para respaldar sus propuestas a fin de enriquecer el planteamiento del gobierno federal, pues sostuvo que se requiere una solución integral y no una respuesta con un plan que les resulta más económico.