"La sociedad reconoce a las mujeres": Ana Carolina Sepúlveda tras ser directora Facultad Medicina-UNAM

No ha terminado de mudar sus libros a la nueva oficina, pero Ana Carolina Sepúlveda Vildósola ya está pensando en colocar una pintura de Matilde Montoya en alguna de las paredes del despacho, para destacar un rostro femenino entre la fuerte presencia de retratos masculinos.

Esta semana, Sepúlveda Vildósola asumió como la primera mujer en dirigir la Facultad de Medicina de la UNAM, para el periodo 2024-2028, una de las entidades con mayor prestigio en la enseñanza médica del país y de Iberoamérica.

Matilde Montoya fue la primera médica en nuestro país, cuando en 1887 presentó su examen profesional para ser reconocida en la medicina y obtener el título de partera, ante cientos de hombres y el mismo presidente de la República en aquellos años, Porfirio Díaz.

A pesar de que ha pasado más de un siglo, aún falta camino por recorrer en el plano de la igualdad, por lo que Sepúlveda Vildósola, médica cirujana por la UNAM, especialista en pediatría y doctora en Ciencias, celebra su nombramiento y las oportunidades que éste conlleva.

En entrevista con MILENIO aborda su plan de trabajo en el que se coloque al estudiante al centro de la enseñanza con un enfoque humanista.

—¿Cómo se siente al ser la primera mujer en dirigir la Facultad de Medicina?—

“Muy contenta, muy honrada por la confianza que me brindan para ocupar este cargo. También siento una gran responsabilidad con mi comunidad y conmigo misma para lograr las metas que nos hemos planteado.

“Esto refleja que la sociedad mexicana y la comunidad académica y universitaria reconoce las mismas capacidades en hombres y mujeres. Que nombrar a una mujer no sea una cuota de género, si no sea un tema de formación, experiencia, capacidad, liderazgo y que sea la mejor persona para ese momento para esa entidad.
"Creo que es un momento histórico para la facultad de medicina, que abre puertas para las mujeres que vienen atrás y un ejemplo para las mujeres que están iniciando. Se está dando justicia a las capacidades de las mujeres.
"Si bien si tenemos las mismas capacidades, somos doblemente observadas.
"Por ello, habrá que rendir cuentas de la confianza que se brinda”, explicó. 

—Medicina es una de las facultades con mayor demanda de ingreso. ¿Se puede seguir creciendo?—

“Es una facultad que en los últimos años ha crecido. Depende de la carrera es el ingreso de estudiantes, en el caso de la licenciatura de investigación biomédica básica, ingresan 13 estudiantes por año; ciencias de la nutrición humana, con 24 a 30 alumnos por generación; Fisioterapia, entre 60 y 70 por generación; licenciatura en neurociencias ha disminuido un poco el ingreso, en la última fueron 26 estudiantes. 

"El incremento de matrícula ha sido especialmente para medicina cirugía general, en los últimos dos años han ingresado cerca de 5 mil estudiantes, más 2 mil 400 en 2022 y más de 2 mil 100 para 2023, en el pregrado.

"Y en el posgrado tenemos 13 mil 500 residentes estudiando una especialidad, alrededor de mil 400 estudiantes en posgrado de alta especialidad y tenemos un número muy importante en educación continua.
"Para que podamos seguir asegurando la formación de los estudiantes, sí tenemos que hacer un análisis muy profundo sobre las capacidades que la facultad tiene tanto en infraestructura física y docente, un análisis de hasta donde ya la facultad no puede albergar más estudiantes. 

"Tenemos la ventaja de esta educación híbrida que se está impulsando mucho más a partir de la pandemia, y esto nos puede brindar algunos recursos para poder llegar a nuestro límite de recepción de estudiantes.
"Yo te diría que si ya estamos llegando al límite y que para que la Facultad pudiera recibir mayor número de estudiantes sin perder la calidad, tendríamos que hablar de un incremento en la infraestructura física y docente”

—¿Pediría más presupuesto?—

"Algunos de los proyectos requerirán un apoyo, ya se en infraestructura o recursos financieros. Sabemos que la universidad tiene un presupuesto autorizado limitado y existe la posibilidad de tener ingresos extraordinarios. 

"Estaremos trabajando en el tema de tratar de procurar un mayor apoyo financiero, ya sea de fundaciones, asociaciones y la venta de servicios como las clínicas que tenemos, del sueño, de oncodermatología, radifarmacia, que brindan servicios a la población", comentó. 

¿Es cierto que en México hay deficiencia de médicos?

“No hay un censo muy exacto sobre la cantidad de médicos y tipos de médicos que tenemos. El sistema de salud mexicano está orientado hacia la especialización médica y no tiene cabida para los médicos generales en el sistema público de atención sanitaria.

"Tenemos que hacer este análisis sobre donde los necesitamos, qué tipos de médicos especialistas necesitamos y crear las condiciones necesarias para que esos médicos especialistas que formamos sí quieran irse a esos lugares donde hacen falta. 

"Los especialistas se concentran en las capitales porque encuentran estas condiciones de desarrollo profesional, pero a veces tampoco tenemos condiciones de seguridad física, y todos estos factores influyen en esta mala distribución de especialistas que sí existen”

—¿La seguridad de los pasantes de medicina en zonas apartadas será una preocupación para usted?—

“Yo creo que es una preocupación para todos, no sólo para mí. La seguridad es uno de los principales problemas de nuestro país.

"El que nuestros estudiantes se vayan a las comunidades sí representa un riesgo en términos de seguridad, pero tenemos que trabajar muy de cerca con los tres niveles de gobierno de los lugares a los que ellos se van y con las instituciones de salud a las que llegan para poder tratar de garantizar medidas de protección para no sólo los médicos, también las enfermeras, enfermeros y otros profesionistas que van a brindar sus servicios a las comunidades.

"También tenemos que trabajar en que las comunidades protejan a sus pasantes. Estamos proponiendo un modelo donde la universidad adopte comunidades y se pueda dar continuidad a programas que se establezcan por parte de la Universidad. 

"Hoy día, cada año pueden cambiarnos las plazas que nos ofrecen las instituciones de salud, entonces no tenemos una continuidad y uno de los proyectos que yo estoy planteando es que adoptemos comunidades con la Universidad y que cada año estemos enviando Pasantes a estas comunidades en donde se pueda demostrar la labor de atención primaria a la salud", mencionó. 

—¿Qué le diría a los estudiantes?—

“Esta es su casa, no importa cuál sea la ubicación física en la que están que sientan que la universidad los protege y los arropa en su proceso educativo. Que las puertas de esta dirección siempre estarán abiertas para escucharlos, me pueden contactar por cualquier medio.

"Debemos fortalecer su formación humanística en el sentido de ponerlos al centro en el proceso de aprendizaje”.

HCM