El pasado miércoles le presentamos la historia de Juanito de 8 años de edad, quien solicitaba un teléfono para poder continuar con sus estudios, ya que por falta de recursos no lo podía adquirir, una persona bondadosa que conoció su situación, decidió ayudarlo con un celular de manera anónima, además de regalarle una despensa sin pensarlo dos veces.
"Me siento muy bien, muy feliz por el celular y por la comida que nos dan, que a veces no tenemos dinero para cenar", comentó Juanito.
La abuelita de Juanito, quien lo acompaña en todo momento, lo apoya en sus estudios, se sentía con mucha nostalgia y feliz por el apoyo que les brindaron.
"Bien orgullosa, rara la persona que nos apoya así, bendito Dios ahora si me siento orgullosa por él, porque ya tiene para hacer sus tareas", dijo Rosa María, abuelita de Juanito.
El pequeñito emocionado, mencionó que algún día se imaginaba con un celular en mano, haciendo sus tareas, logrando sus sueños y que ahora es una realidad.
"Yo si me imaginaba un celular, me daba mucha emoción tenerlo para hacer tareas", expresó el menor.
Juanito y Rosa María, se encuentran felices, porque están seguros que con el celular ya podrá seguir con su educación, para así tener un mejor futuro.
"Muchas gracias por hacerme el favor de regalarme el celular y la comida para almorzar o cenar", manifestó Juanito.
"Yo estoy muy agradecida con la persona que nos hizo favor de apoyar a mi nieto, al menos yo no pensé, porque he pasado por muchas veces así, pidiendo ayuda en un lado y en otro, francamente no me lo imaginé, ahora sí que Dios lo bendiga y que le dé más para seguir adelante", comentó Rosa María.
Ahora Juanito no ve inalcanzable su sueño de ser ingeniero para hacerle una casa a su abuelita cuando sea grande, esto gracias a ese ángel anónimo que decidió apoyar, sin esperar nada a cambio, sólo con el fin de que el pequeño prosiga con su educación.