Tras el paso de la depresión tropical “Hanna” por el área metropolitana el fin de semana pasado, la Arquidiócesis de Monterrey anunció que está dispuesta a ayudar a quienes sufrieron afectaciones materiales por la tormenta.
En su rueda de prensa virtual, el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, dijo que, aunque las autoridades deben ayudar primero, llamó también a los fieles católicos a que apoye a los damnificados con lo que ellos puedan.
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“Hay quienes perdieron la estufa, el refrigerador, su vivienda o las vialidades que están en franca descomposición, esperamos la solidaridad de las autoridades, pero también de nuestros hermanos… la Iglesia de Monterrey está comprometida a quienes han sufrido las inundaciones de Hanna”, precisó Cabrera López.
Aunque no reveló como apoyarán, insistió que estarán al tanto de las necesidades de la población.
Por otra parte, el arzobispo agradeció al hombre originario de Cuernavaca que vive a la orilla del río Santa Catarina, quien encontró la imagen de la Virgen de Guadalupe y dio aviso a las autoridades para que comenzaran a rescatarla.
Y es que diez años después de haber sido arrastrada por el huracán “Álex”, la imagen de la Virgen que conmemoraba la segunda visita del Papa Juan Pablo II a Monterrey quedó al descubierto por “Hanna”.
Declaró que algunos sacerdotes y fieles de la Iglesia han propuesto instalarla en algunas parroquias, pero el Arzobispo reiteró que las autoridades primero deben sacar en su totalidad la imagen (considerada por algunos milagros) y después darle mantenimiento.
“Sé que en tiempos de pandemia no podemos realizar grandes gastos, pero si tenemos que recuperarla para que, en el mejor de los tiempos, la pongamos en un lugar que sea posible- Es un signo muy esperanzador, soy consciente de las prioridades del momento”, indicó.
Por último, solicitó a los sacerdotes que encabezan los templos metropolitanos que se unan para que por medio de redes sociales transmitan la misa, y así le llegue a más personas, debido a que los fines de semana la iglesia permanece cerrada para evitar la propagación de covid-19.