Fernando Cruz Maldonado, mejor conocido como Yesser, es un muralista urbano de 41 años que vive en Ecatepec, Estado de México, y es quien diseñó el mural en honor a Scooby, perrito asesinado en un cazo con aceite hirviendo en Tecámac.
En entrevista con MILENIO, Yesser comentó que la idea surgió tras conocer la trágica historia del canino, pues revela que el lugar donde fueron los hechos es una zona en la cual siempre se reúne para comer con amigos, por lo que la historia la consideró cercana.
"La noticia yo la vi en Facebook y pensé Tecámac, yo vivo cerca de ahí. Es un pueblo donde nosotros -amigos- pasamos por ahí y exactamente donde siempre desayunamos fueron los hechos. Entonces fue parte de mi cotidianidad y dije yo paso aquí y quiero hacerle un tributo a el perrito", comentó.
Fernando mejor conocido en el mundo del arte como “Yeser” junto a su compañero “Geruck” buscan visibilizar “el dolor ajeno” y el respeto por la vida de todos los seres humanos. Dando un mensaje de solidaridad para Roberto Martínez, el menor dueño del lomito.
“Va representada en medio y sobre unas nubes que representa que también es un ser que asciende. A lo mejor Scooby tenía una misión en esta vida y fue esa, crear o despertar conciencia”, dijo en entrevista, el artista grafitero.
Un amigo de nombre Antonio Buendía le consiguió a Yesser "una barda sorpresa", la cual fue a un costado de donde fueron los hechos, por lo que ahí el artista urbano pudo plasmar un gran mensaje.
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"Un amigo de nombre Antonio Buendía, le dije quiero hacer esto y mi amigo dijo deja ver con quién hablo para que te autoricen, después me dijo carnal ya tengo una barda y es una barda sorpresa. La barda fue al lado de donde fueron los hechos", planteó.
Niño, dueño de Scooby, llegó a acariciar la barda
Durante la entrevista, Yesser comentó que pasó algo muy curioso, pues nunca avisó a los dueños sobre el mural, sin embargo, cuando lo concluyó -en la noche- se retiró y al otro día fue a tomarle una fotografía al mural, fue el momento cuando notó a un pequeño acariciando la barda, por lo que preguntó quién era y le dijo que el perrito era suyo.
"La verdad como terminé noche no tuve la oportunidad de tomarle un foto y en la mañana fuimos a tomarle una foto, fue entonces cuando llegamos y vimos que estaba un niño, le pregunté que qué tenía pues lloraba un poco y fue entonces cuando me dijo que él era el dueño de Scooby.
Hablé con el pequeño y le dije que le obsequiaba el mural, pues con el siempre estará presente su perrito", expresó.
Hizo un llamado a la sociedad para respetar y no agredir a ningún ser vivo, pues hizo hincapié en que eso pudo pasarle a cualquier persona o animal.
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Fernando mejor conocido en el mundo del arte como “Yeser” junto a su compañero “Geruck” buscan visibilizar “el dolor ajeno” y el respeto por la vida de todos los seres humanos. Dando un mensaje de solidaridad para Roberto Martínez, el menor dueño del lomito.
“Un mensaje que les llegue a todos porque el dolor ajeno, nadie lo escarmienta pero las heridas que causa, si. Creo que todos los que hemos tenido mascota, sabemos el dolor que es alejarse de ellas”.
HCM