Para Edgar, mejor conocido como "El Tecate", la modificación de los automóviles es como un vicio "una vez que empiezas, comienzas a meterle y a meterle". Para él no hay distinción entre modelos de los automóviles, lo importante es qué tan tuneado esté o las cosas extraordinarias que haga el vehículo, en este caso es un Tsuru de la marca Nissan.
El Tsuru de Edgar tiene suspensión de aire, lo que permite que con un control remoto, su auto se levante o baje en dos o en las cuatro ruedas, su volante es desmontable, el cofre es de fibra de carbono, el quema cocos es de dos posiciones, los asientos están modificados con pantallas, el motor está modificado y el tablero, la pintura es bicapa con perla con los colores propios que lo distinguen de los demás: un taxi de la Ciudad de México.
En entrevista para MILENIO, el joven taxista explica con un gran orgullo y satisfacción que su auto es para servicio público y explica que a pesar de todas las modificaciones en el motor, asientos y estructura, el banderazo es de 13 pesos con 10 centavos y aumenta cada 250 metros o 45 segundos un peso con 30 centavos "como cualquier otro taxi", dice. Asegura que sus clientes se sorprenden al disfrutar de las comodidades que brinda las modificaciones que tiene el auto "me lo alaban mucho y les digo que muchas gracias; sí me lo alaban mucho por las cosas que trae".
Edgar al igual que otros 300 usuarios miembros de al menos 30 clubes de autos modificados llevaron sus automóviles a la rodada para celebrar el Día Internacional de los autos modificados que partió del Auditorio Nacional al Monumento a la Revolución. Pese a que la celebración es el 7 de septiembre, la rodada fue el cinco, pues es el día en el que las familias y trabajadores pueden reunirse.
Aldo Núñez, uno de los organizadores de la Rodada Tunning, explicó que el Día Internacional del los autos tuneados se celebra el 7 de septiembre, pues fue ese día pero de 2001 cuando se estreno la primera película de la saga "Rápidos y furiosos", cintas que se convirtieron en estandarte de esta práctica. Aseguró que a la rodada fueron convocados todo tipo de estilo de autos: clásicos, tunning, Euro, bochos, JBM.
"Realmente se demostró que se puede hacer una rodada y convivir sanamente en familia con las restricciones contra el covid-19" dijo.
A las 15:00 horas, bajo el cielo nublado de la Ciudad de México, partieron del Auditorio Nacional los más de 300 autos entre antiguos, con modificaciones en la pintura, en los motores y suspensiones, que rodaron para mostrar con orgullo los cientos de miles de pesos invertidos en los automóviles. A su paso por Paseo de la Reforma con destino al Monumento a la Revolución, la rodada fue también una demostración andante de los avances tecnológicos en las modificaciones.
Esteban Gómez, miembro del Club Team Brothers tiene en su poder dos Golf GTi 2020 con modificaciones y con lo último en suspensiones de aire, pues desde su teléfono puede maniobrar las suspensiones para que el auto baje y suba en dos y cuatro ruedas, ya sea con el bluetooth o bien apoyándose del giroscopio del celular pues con un sólo movimiento de la muñeca, el auto se mueve.
No obstante, el llamado es uno, "que no sean señalados como delincuentes", pues consideran que son un extracto de la sociedad que impulsa la economía y une familias "eso es lo que queremos, alzar la voz y decir que los que somos aquí no somos delincuentes, somos alguien, una comunidad que tratamos de presumir las modificaciones a nuestros autos" pues "un carro tunning es como un arte".
Después de una hora de por Paseo de la Reforma y con la lluvia cayendo sobre el asfalto y las modificaciones de los automotores, los usuarios llegaron al Monumento a la Revolución para reunirse con los demás clubes y ver las diversas modificaciones, pero sobre todo para demostrar a la sociedad que el tunning no es una práctica propia de delincuentes sino que es un motivo más para reunir a la familia en un ambiente sano.
FS