Tras 84 años de servicio, el balneario Lindo Michoacán en Guadalajara cerró sus puertas al público definitivamente.
Las albercas y toboganes que ofrecieron horas de diversión a miles de familias tapatías, ahora quedaron en el recuerdo, pues sus instalaciones ubicadas en Río La Barca 1614 entre González Gallo y R. Michel hoy están “en los huesos”.
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Aquellas piscinas que refrescaban a chicos y grandes, lucen vacías y llenas de tierra, al igual que las terrazas que ofrecían sombra para charlar o comer la merienda, solo quedaron en la estructura.
Era por su ubicación dentro de Guadalajara y los accesibles precios que incluían áreas verdes, toboganes, resbaladillas y chapoteaderos por lo que este sitio se mantuvo como el favorito de los ciudadanos que buscaban relajarse y dentro de la metrópoli.
¿Por qué cerró Lindo Michoacán?
Hasta el momento, se desconoce el porqué del cierre, sin embargo, fue durante los cierres la pandemia por covid-19 que este “paraíso en la ciudad” se vio fuertemente golpeado, pues las personas temían convivir en las albercas que solían abarrotarse y posiblemente contagiarse del virus, razón por la que dejaron de asistir, provocando bajas importantes en los ingresos del lugar.
Su administrador reveló en en abril 2021 que operaban con la mitad del aforo, por las restricciones oficiales ante la pandemia. El balneario tuvo que cerrar por seis meses y regresó a la espera de la recuperación.
Pese a que resistió el prolongado cierre por las medidas sanitarias, la familia que la administraba e iba por su tercera generación al frente reportaba escasa asistencia.
Este cierre significa una pérdida para varias generaciones de tapatíos que gozaron del icónico lugar, algo que quedará solo en el recuerdo.
SRN