El ordenamiento territorial, sustentabilidad hídrica, participación de los municipios para detener descargas, recursos de los tres niveles de gobierno, atención a plantas de tratamiento y la coordinación de acciones del gobierno del estado, son las bases para el desarrollo de la Propuesta Objetiva de Saneamiento del Río Atoyac, en la que trabajan cinco dependencias de la administración estatal.
Después de que en el Periódico Oficial del Estado de Puebla, el Ejecutivo estatal, encabezado por Miguel Barbosa, publicó un acuerdo por el que instruye a la Unidad de Inversión de la Secretaría de Planeación y Finanzas, para que encabece un grupo de trabajo que elabore una propuesta que tenga como objetivo detener las descargas y limpiar el afluente de la cuenca del Atoyac, el proyecto avanza con un análisis de descargas, de problemas territoriales y de alternativas para tratar las aguas y la búsqueda de opciones para la aplicación de recursos.
De la misma forma, la Propuesta Objetiva de Saneamiento del Río Atoyac será presentada a los gobiernos municipales electos para que desde que comiencen sus administraciones el 15 de octubre, inicie la gestión de recursos ante el gobierno federal para desarrollar infraestructura encaminada a detener las descargas, se realicen las adecuaciones de las normas municipales y se invite a diferentes sectores de la sociedad en el desarrollo de acciones para rescatar las barrancas, afluentes y ríos de la cuenca.
El grupo de trabajo que desarrolla el plan de rescate de la cuenca del Atoyac está conformado por la Secretaría de Planeación y Finanzas, la Secretaría de Infraestructura, la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, la Dirección General de la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento del Estado de Puebla y el Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Puebla (Soapap).
La Secretaría de Planeación y Finanzas se encargará de revisar que los gobiernos municipales gestionen recursos de la Federación para que en sus presupuestos incluyan recursos etiquetados para colaborar con detener las descargas ilegales al Atoyac y para el desarrollo de infraestructura encaminada a la limpieza del agua, así como la conservación del medio ambiente de la cuenca.
Tras revisar la propuesta, Verónica Mastretta Guzmán, consejera de la organización no gubernamental Dale la Cara al Atoyac, agrupación civil que impulsa desde años atrás el rescate de la cuenca, explicó que el proyecto es viable y, a diferencia de gestiones estatales pasadas, puede dar resultados porque el gobierno del estado asume la coordinación de esfuerzos.
“La propuesta pone énfasis en la planeación y en la recopilación de información. Eso me parece positivo. Tú no puedes resolver un problema si no sabes de lo que estás hablando. Este grupo interdisciplinario, me parece muy bien que esté formado con la participación de cinco áreas de gobierno que son los que están con el problema en las manos. La Secretaría de Planeación y Finanzas tendrá que revisar el presupuesto de los ayuntamientos y tienen que contemplar presupuesto para obras hídricas y los puntos en los que se desarrollarán”, apuntó.
El grupo interinstitucional que desarrolla la propuesta de rescate de la cuenca tiene una visión integral del problema y, con ello, se busca brindar una solución conjunta con apoyo de las administraciones municipales.
“Agua alineada a sustentabilidad hídrica y ordenamiento del territorio, es la base. Me parece interesante comentarlo. De parte de Dale la Cara al Atoyac, lo vemos muy bien. Es fundamental que se sienten a pensar de manera interna en acciones para resolver los problemas. Muchas veces se invitan a consejos en los que invitan a diferentes actores, pero no tienen la función. Ahora, plantean un grupo que está trabajando, es un grupo ejecutivo que cumplirá con el trabajo de la administración estatal”, detalló.
Mastretta Guzmán destacó que el gobierno del estado está iniciando el camino correcto para la recuperación de la cuenca, una de las más contaminadas del país y que abarca de manera directa a más de 26 municipios.
“El río viene por San Martín Texmelucan, Huejotzingo, toda esta parte que se ha vuelto un corredor industrial con muchas cosas que son agresivas para el ambiente y que fue mal manejado en el pasado. Tenemos el caso del colector Morelos para sacar el agua del parque industrial de Huejotzingo y mandarla a una comunidad de Juan C. Bonilla. Ese municipio no tiene por qué cargar con esas descargas. Esta obra es una muestra de que no se está planeando bien. Hoy se tiene que planear y trabajar en conjunto”, destacó.
Explicó que para Dale la Cara al Atoyac, la cuenca que está catalogada como una de las más contaminadas del país, no se puede pensar desde una división política municipal, sino desde una visión conjunta para erradicar un problema que afecta a todas las poblaciones.
“No se puede seguir con la visión de que cada ayuntamiento resuelva su pedazo. Se tiene que pensar desde la cuenca, la palabra lo dice todo, es un cuenco donde está el agua de toda una región. Se tiene que pensar de una manera integral y que se coordine a todos los sectores. Para eso está pensado este grupo interinstitucional”.
AFM