Uno de los aficionados más reconocido por la afición esmeralda es ‘Bi Chuy’ el de la máscara de la puerta 5 del Estadio León.
El usar máscara es también por su pasión por la lucha libre, quiso comprar una máscara con un señor que vendía la entrada del estadio y de ahí surgió la idea por usar una incógnita.
“La máscara surge en aquella invasión a la cancha cuando se pierde contra Indios, no exactamente en ese partido, pero en la siguiente temporada iba yo caminando al estadio a un partido, el chiste es que me encuentro a un señor vendiendo máscaras en la entrada del estadio, me la compro me la pongo y de ese partido para acá jamás me la he quitado, hasta esta temporada que no me han dejado entrar con ella por la pandemia, pero la modifique empecé a hacer la máscara a mi gusto, a mi estilo y se quedó, eso fue a partir del 2008 para acá que esta la máscara, quise dejar de ser uno del montón y ser alguien que sobresaliera”, comentó.
Su amor por el León surge desde que era pequeño, pero fue ya hasta su adolescencia que empezó a seguir al pie del cañón a la Fiera.
“Surge en 1992 cuando el León queda campeón por quita ocasión, me toco ver el estadio lleno de banderas, y quién no se va a enamorar del ambiente y que mejor que con un triunfo, yo tenía 9 años .Cuando empecé a seguir bien al León fue en el año de 1997 ya cuando era un adolecente, me toca ir a una siguiente final que se pierde contra Cruz Azul. Recuerdo que tenía muy buen juego, se jugó una liguilla muy bonita, me queda un sabor amargo por la derrota, después viene el 2002 y el descenso. Descenso empecé a seguir bien al equipo”, dijo.
Para Chuy uno de sus jugadores favoritos siempre fue “El Chato” Ferreira junto con uno de los iconos de la Fiera, el gran Milton Queiroz “Tita”. También comentó que su mejor recuerdo con el León fue en el año 92 y en el Ascenso del 2012.
Este aficionado verdiblanco, prefiere ir al estadio que a las fiestas familiares, dice que primero es el verde que su familia.
“He dejado ir a fiesta familiares por irme al estadio, tengo muchas primas que de repente se agarran un año de puros XV años, sobrinas que se casaron, algún pariente que tiene fiesta y siempre me toca que es cuando juega el León, y prefiero ir al partido que estar en las fiestas, a veces ya he llegado al final, y ni modo primero el verde”, manifestó.
Bi Chuy no ha hecho cosas extremas por conseguir un boleto, pues cuenta con amistades que se ofrecen para comprarle sus boletos.
“Cuento con amistades que le van al Club León, no me he visto en la necesidad de hacer algo extremo, saben que cuando no puedo ir a comprar boletos cuando son finales, amablemente siempre se ofrecen a comprarme mi boleto. De alguna manera nunca he batallado”, comentó.
Gracias la Fiera ha viajado a varias ciudades, entre ellas Zacatepec. También cuenta que varios porteros le han regalado sus guantes, entre ellos el ex arquero William Yarbrough.
“En las aventuras que me han pasado, me han tocado peleas, campales, que se me descomponga el carro en el camino, y conocer a gente que cuenten sobre su equipo. Una vez fui a Zacatepec y me decía la gente que era el infierno y era un calor del diablo, y que Zacatepec es de terror. Tengo todas las playeras, tengo la suerte que me han regalado guantes de los porteros, de William, Christian, Pocho Blanco, tengo de profesores, entrenadores de porteros, de Capirosi, Chavita, tengo muchos boletos”, declaró.
Para Bi Chuy el León significa más que una pasión, amor. Ha vivido derrotas, alegrías y ha tenido el gusto de tener obsequios de jugadores esmeraldas. No falta cada 15 días en el estadio en su lugar puerta SOL 5 atrás de la portería, y comenta que cuando León gana va a su trabajo más contento.
“El León para mí significa alegría, tristeza, todas las sensaciones, porque cuando el León gana, llego bien a gusto a trabajar, y cuando pierde ando todo desanimado”, aseguró.